Si ya antes de la pandemia, cumplir con la ratio profesor- alumnos en el IES San Tomé era complejo, con la llegada del COVID la situación se recrudeció, incluso viéndose obligado el centro a cerrar su cafetería por no poder ofrecer vigilancia suficiente en un espacio donde los estudiantes acudían en grupo y se quitaban las mascarillas para consumir. Para este próximo curso contaban incrementar en al menos “uno o dos profesores” su plantilla, pero se han encontrado con la repentina decisión de Educación de reducirles un docente, lo que a estas alturas les impide organizar los horarios ni cubrir guardias.

El equipo directivo del centro manifiesta su rechazo de la actual política de recortes de las plantillas de profesorado anteriores al curso 2019/2020, que se están aplicando en la comunidad educativa, especialmente en esta delicada situación sanitaria en la que nos encontramos y solicita al consejero de Educación que reconsidere esta medida, dotando al IES San Tomé del profesorado necesario para organizar el incipiente curso escolar con las debidas garantías. “Estamos muy preocupados por cómo vamos a organizar el curso que viene, con un profesor menos que hace dos cursos escolares, recorte que no obedece en absoluto a una disminución del alumnado o de las materias”, explican desde el centro.

Y es que el instituto ubicado en plaza América es, junto al IES Politécnico de Vigo, el que cuenta con un mayor número de alumnado en la ciudad: más de 800 estudiantes de ESO y Bachillerato acuden a sus instalaciones a diario.

Oferta libre

Además, se trata del único que cuenta con una oferta libre de materias. “Los alumnos eligen las diferentes asignaturas en función de sus preferencias pero claro, luego hay que tener profesores que impartan esa materia. Al recortarnos uno hace que no podamos confeccionar los horarios todavía. Además para cubrir las guardias de los recreos también vamos a tenerlo muy complicado”, desgrana María Sío, la directora del instituto vigués.

Y es que con la plantilla que cuentan para el curso 21/22, reconoce Sío, tendrán “serias dificultades” para organizar el curso y para la “vigilancia” del alumnado, “imprescindible” en los tiempos actuales de pandemia.

Según fuentes consultadas, este recorte no es el único que afecta al área de Vigo, ya que un instituto de Cangas también se han recortados varios docentes de cara al próximo curso que empieza en septiembre.