La evolución de la pandemia en el área sanitaria de Vigo está estancada. Ni empeora ni acaba de mejorar. Y así lleva ya dos semanas. En este tiempo, la incidencia acumulada a 14 días se ha movido en un horquilla de entre 116 nuevos casos por cien mil habitantes a 128. Ayer estaba en 122.

Según el último parte de Sanidade, los laboratorios del Complejo Hospitalario Universitario de Vigo (Chuvi) detectaron el viernes 54 nuevos contagios entre la población de la comarca. Sin embargo, fueron más las altas concedidas –65–, por lo que los casos activos de COVID bajaron en once.

Parte de estos nuevos casos corresponden al brote que crece en torno al Instituto de Educación Secundaria (IES) de Mos. Según la Consellería de Educación, el viernes eran ya 22 los contagiados por el nuevo coronavirus entre su alumnado y su cuadro docente. El Área Sanitaria de Vigo desplazó ayer al centro educativos a un equipo de profesionales para realizar un cribado a los alrededor de 700 estudiantes y profesores.

Más allá del instituto, los contagios se expanden entre las familias. Así, solo en la última semana, el municipio registró 45 nuevas infecciones. Con una incidencia a 14 días de 365 diagnósticos por cada cien mil habitantes y de 298 a 7 días, es la localidad con peor situación del área.

Le sigue Moaña, que también ha empeorado su situación en los últimos días y está en 227 nuevos casos por cien mil residentes a dos semanas.

La ciudad de Vigo, en cambio, mejora algo sus cifras y está mejor que la media del área por un punto –121–, aunque su evolución parece mejor, ya que la incidencia de la última semana es de 50 contagios por cien mil habitantes frente a los 57 del conjunto de la comarca.

39 hospitalizados

La presión asistencial se mantiene más o menos estable, con un contagiado por el SARS-CoV-2 más en las unidades de críticos de la red de hospitales vigueses, pero dos menos en planta. En el Álvaro Cunqueiro había ayer 19 pacientes con COVID ingresados; en Povisa, siete; y en Vithas Fátima, 13.