Jean Ovide Claude Desclos es un ciudadano francés afincado en España desde hace muchos años. Nos dejó el 26 de febrero a las 13.30 horas a los 87 años de edad. Se instaló con su familia en las islas Canarias en 1970 y posteriormente se afincó en Galicia en 1972, concretamente en Vigo, donde desarrolló su actividad profesional en el mundo de la pesca, siendo instructor de desarrollo de pesca para la FAO en los años 70 y luego desarrollando negocios relacionados con la electrónica naval.
En este contexto fue director de la agencia en Vigo de la empresa Noruega SIMRAD con ámbito de actuación en España, Portugal y Norte de África, y luego administrador de la empresa Hidroacústica y Telecomunicaciones SA., ambas dedicadas a la incorporación de la tecnología de los sonares a bordo de los barcos pesqueros, tema pionero en aquellos tiempos.
Su actividad en los negocios relacionados con el mundo del mar en España no le impidió seguir estrechamente relacionado con su país de origen, Francia, siendo Cónsul Honorario en Vigo durante 22 años -de 1980 a 2002- después de haber alcanzado el límite de edad establecido para este cargo, y cediendo entonces el testigo a su esposa Liliane Desclos.
Su vinculación al mundo del mar y su dedicación a la República Francesa fueron oficia y públicamente reconocidas con la concesión de las condecoraciones de Caballero de la orden del Mérito Marítimo Francés y de Caballero de la orden Nacional del Mérito de la República Francesa.
Conocí a Jean en 1985, cuando llegué a Vigo procedente de Francia para instalarme con mi familia en esta ciudad, justo en la época de la adhesión de España a la Unión Europea. Su ayuda y consejos como Cónsul me fueron muy útiles, especialmente en aquellos tiempos en los cuales los procedimientos para la instalación no eran tan fluidos como de hoy en día. Además seguí también una andadura profesional en el mundo del mar, por lo que seguimos teniendo muchas relaciones durante años. Siempre contó conmigo en los eventos oficiales relacionados con Francia en el entorno Provincial.
Además de su andadura profesional y de su faceta de representante de Francia, Jean estuvo muy vinculado con obras de intere?s social siendo cofundador y expresidente de la asociación para la salud mental DOA.
En todas estas tareas contó con el apoyo constante de su esposa Liliane, también cofundadora de dicha asociación, además de haber sido directora de la Alianza Francesa de Vigo, Cónsul Honorario de Francia después de su marido hasta el 2007, cuando me transmitió el cargo, y también públicamente reconocida por Vigo, como Viguesa Distinguida en 1991 y por Francia, siendo condecorada como Caballero de la Orden de las Palmas Académicas.
Jean, podemos decir que has tenido una vida muy llena y generosa. Que descanses en Paz.
*Cónsul Honorario de Francia en Vigo
