Nuevo fraude en el cobro de pensiones. La Sección Quinta de la Audiencia con sede en Vigo juzgará el próximo miércoles a un vecino de la ciudad acusado de cobrar durante seis años la pensión de una persona que había fallecido y en cuya cuenta bancaria estaba autorizado. La cantidad total suma 89.000 euros.
Desde el 6 de febrero de 2010, fecha de la muerte del beneficiario, hasta el 15 de marzo de 2016, fecha en al que la Administración verificó el fallecimiento, el acusado continuó disponiendo del dinero que ingresaba el INSS sin comunicar el deceso, según el escrito de acusación de la Fiscalía, que solicita una condena de 3 años y multa de 89.000 euros.
Dado que la entidad bancaria devolvió al INSS 58.397 euros, la Seguridad Social reclama la devolución de los 29.692 euros restantes. El fiscal fija por tanto la responsabilidad civil a la que debe hacer frente al acusado en 29.692 euros para el INSS y 58.397 euros para la entidad bancaria, con los recargos e intereses aplicables.