Los responsables del Puesto de Inspección Fronteriza (PIF), del Puerto de Vigo y de los servicios de inspección de Sanidad Vegetal, Sanidad Animal y Sanidad Exterior abordaron este viernes alternativas al control de las harinas de pescado que no se pueden realizar en las actuales instalaciones por sus "deficiencias" para garantizar la salubridad de este tipo de productos. Como avanzó FARO, tras decretarse el veto a la importación de estas mercancías, Sanidad Animal acabó levantándolo para dar margen al Puerto de Vigo para corregir aspectos como la falta de espacio donde analizar las muestras.

La Subdelegación del Gobierno en Pontevedra explicaba ayer en un comunicado que tras esta reunión las partes están estudiando varias alternativas hasta que se concluyan las obras de adecuación de las instalaciones. Asegura que esta situación deriva de una inspección inicial realizada el pasado mes de septiembre en la zona del recinto de Guixar donde se controlan estas importaciones.