El matrimonio formado por Begoña Martín y José Fernández logró ayer, con ayuda de la Favec, paralizar al menos durante una semana más su procedimiento de desahucio por el que deberán abandonar la vivienda de la calle Chouzo en la que residen desde hace años. Se trata de una casa con un alquiler de renta antigua y aunque la familia cumplía con el pago de las mensualidades -145 euros- la propietaria no quiere seguir alquilándolo.

Estos vigueses se encontraron ayer con la comisión judicial y un cerrajero que pretendía hacer efectivo el lanzamiento, si bien lograron demorarlo un semana, tiempo que esperan sea suficiente para encontrar una alternativa. "Sino encontramos una vivienda, tendremos que irnos a vivir a nuestra furgoneta", lloraba el matrimonio.

Por su parte, la concejala de Bienestar, Isaura Abelairas aseguró que el Concello le brindó la oportunidad de realojarse en un hostal mientras siguen buscando una solución.