El área sanitaria de Vigo ofrece cada año veinte plazas para formar a especialistas en Medicina de Familia. En la última promoción, solo doce terminaron los cuatro años de residencia. Y nueve meses después de concluirla, solo seis siguen trabajando en los centros de salud vigueses. El resto se ha fugado al sector privado, a otras instituciones públicas o a otras zonas.
En la lista de contratación de médicos de familia del área de sanitaria no hay ningún facultativo disponible. Con vínculos de diferente tipo, pero todos están trabajando. El Sergas defiende que no hay doctores suficientes para atender las necesidades y considera que es necesario aumentar el número de especialistas en formación, por lo que ha solicitado al Ministerio de Sanidad la convocatoria de un MIR extraordinario. Tanto los jefes de servicio dimisionarios -hoy van 21 dimisiones irrevocables presentadas- como el colectivo de Precarias pola Atención Primaria piden a la Administración que ponga el foco en conservar a los que forma y recuperar a los que se han ido.
En esta última promoción de médicos de familia, de los veinte a los que se les asignó la plaza de formación para empezar en 2015, dos no llegaron a tomar posesión de ella. Otros seis fueron cayendo a lo largo de los cuatro años de especialidad por diferentes motivos, pero diversas fuentes sostienen que pesó la exigencia de esta residencia, con muchas guardias en muchas especialidades. Aunque todo el mundo subraya la gran calidad de la formación que reciben.
También consideran que los centros de salud del sistema nacional de salud son el mejor espacio para desarrollar su carrera. Pero tras seis años de carrera, uno de preparación del examen MIR y otros cuatro de especialidad, algunos no están dispuestos a estar varios años con contratos temporales con las condiciones del Sergas y se buscan otras opciones. De las doce personas que terminaron el pasado mes de mayo, dos han encontrado trabajo en el sector privado. Otra está en otra institución pública gallega por mejorar las condiciones del Sergas. Una cuarta ha accedido a la Administración general del Estado por los horarios y la estabilidad. A otra le han atraído las mejores ofertas del País Vasco y la sexta se ha ido a otra área sanitaria de Galicia. A esta última la mueven los motivos personales. Entraría en ese pequeño porcentaje de médicos que trata de acercarse a su familia o a su casa una vez finalizada la residencia.
El colectivo PAC en Pé de Guerra emitió ayer un comunicado en el que defiende que el nuevo contrato para eventuales propuesto por el Sergas "no va a solucionar el problema de personal".
