El encendido del alumbrado navideño programado para el sábado a las 19.30 depende de la predicción del tiempo, y según las últimas previsiones es muy probable que la lluvia pueda estropear esta cita. El alcalde, Abel Caballero, es consciente de ello y hoy tomará una decisión definitiva sobre si se mantiene la fecha marcada o se aplaza para cuando el pronóstico mejore.

"La pinta para el sábado es mala, vamos a esperar hasta mañana o pasado. Si la predicción se mantiene habrá que tomar una decisión porque a esa hora dan lluvia intensa", reconoció ayer. A pesar de todo se mostró optimista y aseguró que el tiempo "en unos días puede variar" y prometió que "si hay un hueco sin lluvia el sábado a las 19.30 continúa con el encendido".

Además, Caballero informó de que se cortará al tráfico una parte importante del centro de la ciudad para permitir un fácil acceso a la gente que quiera contemplar las luces. "Va a ser un plan de tráfico complejo", advirtió. Por su parte, en las calles de Vigo se ultiman los detalles de la decoración de cara al gran día, donde los protagonistas serán el árbol de más de 30 metros de Porta do Sol, el muñeco de nieve de la calle Colón y la bola de la farola de Urzáiz.

Las agencias de viajes no dejan pasar la oportunidad y algunas como Viajes El Camino, de Santiago de Compostela, aprovechan la expectación generada por la decoración navideña viguesa para programar excursiones. "Estamos formando un grupo de 55 personas para ver las luces el 16 de diciembre", explicó Beatriz, una de las organizadoras.