Desde el comité de empresa de Povisa cuentan que, hace tiempo que la dirección del hospital les transmitió que el concierto con el Sergas daba pérdidas. Confiesan, sin embargo, que ayer se llevaron una sorpresa cuando les comunicaron que entraban en preconcurso de acreedores. Confían en que se trate de "una medida de presión" y, en los tres meses de negociaciones que se abren, se alcance un acuerdo con la Xunta. Lamentan que la falta de entendimiento les esté poniendo "en el disparadero".

Con una plantilla de 1.420 trabajadores, Povisa se sitúa como la tercera empresa de la ciudad con más empleados en nómina. La actual "falta de liquidez" del hospital del Grupo Nosa Terra XXI pone en riesgo el pago de sus nóminas. Ya estuvo en riesgo el pago a tiempo de parte del salario de este mes, tal y como les trasladaron en la reunión mantenida ayer. Una transferencia de la Xunta con un adelanto efectuada ayer resolvió la situación. "Pero están en el aire las de los próximos meses", señala Xurxo Cabral, delegado de Comisiones Obreras.

"No nos metemos en las negociaciones con Sanidade; cada uno tiene sus responsabilidades. La nuestra es atender a los pacientes y pedimos que nos paguen por ese trabajo", añadió el representante sindical. María Jesús Neira, de la Confederación Intersindical Galega (CIG), propone que eche mano de los beneficios de otras empresas del grupo para garantizar los salarios. Recuerda que, además, llevan con el convenio congelado desde 2010 y lamenta que, en esta situación, sea difícil que se pueda actualizar tampoco este año.

Los sindicatos cuentan que eran conocidos los problemas ente Povisa y el Sergas por la facturación de la medicación, pero les sorprende que cuatro años después de la entrada en vigor del convenio sigan teniendo discrepancias en la interpretación de varios puntos.

La CIG ha puesto en manos de sus asesores y economistas la información facilitada por la empresa para decidir qué medidas adoptar. "No nos vamos a quedar con los brazos cruzados", avanza Neira. El comité también está a la espera de cómo se resuelve la reunión que el próximo lunes mantiene la dirección del hospital de la calle Salamanca con responsables del Sergas. Esperan que las negociaciones "lleguen a buen puerto".