Tras una larga espera que a punto estuvo de alcanzar los cuatro años y varias suspensiones después, casi todas por la gran carga de trabajo que soporta el Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Vigo, esta sala acogió ayer por fin el juicio por el divorcio de Silvia Fominaya. Con la cuestión de las visitas de los dos hijos que tiene en común con su exmarido resuelta, la vista se centró en cuestiones económicas. Junto a la pensión alimenticia mensual para los menores, la actriz, modelo y presentadora pide que su expareja, empresario gallego, le pase también a ella una pensión compensatoria "por todos los años que no trabajé". "Yo antes no salía de la televisión y ahora no consigo entrar; la dejé porque mi marido no estaba conforme con que trabajase en esos medios y ahora es difícil hacerse un hueco", explicó, agregando que demanda dicha pensión de forma "temporal". "Soy muy joven y estoy intentando encontrar trabajo", afirmó.

En la demanda de divorcio la actriz solicita a su exesposo una pensión mensual para ella de 6.000 euros y de 8.800 para sus dos niños, que ya perciben una mensualidad, pero de cuantía muy inferior. La abogada que representa a Fominaya no quiso pronunciarse, al finalizar el juicio, sobre las cantidades que piden, incidiendo en que las mismas las "puntualizará" en su informe final en función de una diligencia económica que está pendiente.Y es que pese a que ayer se practicó la prueba testifical y pericial, al faltar esta documental, una vez llegue será cuando los letrados de Silvia y de su ex presenten definitivamente por escrito al juzgado sus conclusiones finales.

Desde 2015

La causa del divorcio de Fominaya se lleva en el juzgado especializado en violencia de género ya que, en enero de 2015, la actriz denunció a su esposo por maltrato. "Intentó estrangularme", recordó ayer, añadiendo que el hombre tiene una "sentencia condenatoria firme" por malos tratos. La letrada de Fominaya ahondó en que precisamente por esa condena la vista del divorcio se celebra en esta sala. "Llevo aguardando tres años y diez meses por este juicio, y esta larga espera me provocó muchos trastornos, sobre todo psicológicos; este juzgado está colapsado, la jueza necesita ayuda", indicó la actriz, que vive con sus hijos en Tomiño, aunque en el futuro, si encuentra trabajo, no descartaría trasladarse a Madrid. "Por el momento sigo aquí; al menos tengo una casa", afirmó.

Si bien la cuantía por alimentos a los hijos ya se aplica desde que arranca un proceso judicial de estas características, la pensión compensatoria no se pudo plantear hasta juicio. "No encuentro trabajo; y no porque no quiera, lo intento, conseguí cosas esporádicas, como en un capítulo de 'La que se avecina", dijo Fominaya. "Me resulta complicado, llevo años retirada, desde 2007...; me encantaría trabajar de actriz, ahora que hay tantas series", añadió la mujer, que tuvo el apoyo en el juzgado de varias personas cercanas, entre ellas su representante.

Por otra parte, los abogados que representan a su exmarido eludieron hacer declaraciones alegando que se trata de un procedimiento judicial "privado" en el que hay "menores" de por medio.