Los dos juzgados que en la actualidad se encargan de tramitar demandas de cláusulas suelo en Vigo afrontan un aluvión de trabajo. Uno de ellos es el ubicado en el Casco Vello, que entre junio y diciembre de 2017 registró algo más de 3.000 demandas. Alternativas na Xustiza-CUT incidió ayer en que ya tienen juicios señalados hasta abril de 2019 y que a mayores quedan cientos de demandas a las que aún no se les puso fecha de vista oral. "Tienen trabajo para el resto de 2019 y 2020", afirma el portavoz del sindicato, Pablo Valeiras.
Valeiras denuncia el colapso no solo de este juzgado, sino también del que se encarga de las demandas que se registran desde el 1 de enero de este 2018. Se trata del Juzgado de Primera Instancia 14, que ya acumula 2.000 litigios de suelo hipotecario. Su plantilla es de siete funcionarios, uno menos que el resto de salas civiles. "Además de esto hay una persona de baja y la Xunta no cubrió esta plaza", explica. Este tribunal carece de sala de vistas propia y utiliza la que se acondicionó en la de bodas.
