Agosto es el mes de menor actividad judicial al ser inhábil para la mayoría de actuaciones procesales. Con este escenario, el arranque de septiembre supone la vuelta del habitual ritmo frenético en los juzgados. Y el primer día laborable del mes suele ser también uno de los de mayor trabajo para los procuradores, debido a la avalancha de notificaciones de sentencias y de otro tipo de resoluciones que reciben por parte de los tribunales. Este año, sin embargo, el aluvión fue menor que en anteriores ejercicios. El motivo es que se emitió una instrucción, a nivel de toda Galicia, por la cual se impuso un tope máximo diario de notificaciones por sala precisamente para evitar una difusión masiva en una sola jornada. El objetivo es que el envío de resoluciones se haga de forma escalonada durante toda esta semana. Ayer el Colegio de Procuradores de Vigo recibió algo más de 3.300 resoluciones de las que estaban acumuladas desde finales de julio: procedían de los juzgados de la urbe olívica -2.444 de las mismas- y también de los de Redondela, Tui, Porriño y Ponteareas. Un número superior al de una jornada habitual, pero que no alcanza las hasta 4.500 o incluso más que llegó a haber en otros inicios del curso judicial.

"Este septiembre la vuelta ha sido más suave. El volumen de notificaciones está un 30% por encima de un día normal, pero no es la avalancha de otros años. El envío se hará de forma escalonada durante estos días", valoraba ayer el decano de los procuradores, José Antonio Fandiño. Los juzgados remiten estas comunicaciones a través de Lexnet. Este año la secretaria de Gobierno del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) emitió un acuerdo que se envió a todos los letrados de la Administración de Justicia (secretarios judiciales) en el que se informaba de que durante toda esta semana habrá una cuota máxima de notificación diaria por órgano judicial. Una vez superada, el sistema muestra un mensaje informativo avisando que únicamente se podrán remitir más si éstas son urgentes y con autorización expresa del letrado judicial.

Y así fue. En un tribunal civil una funcionaria envió ayer 101 resoluciones, agotando prácticamente el cupo de toda la sala, ya que otra trabajadora ya solo pudo notificar 13. "Yo remití 22 y no pude notificar más", comentaban en otra sala. Al margen de este límite, aunque desde la Amtega, dependiente de la Xunta, señalaron ayer que no consta que se produjesen incidencias en Lexnet, en algunos juzgados relataron que el sistema iba "lento". El decano de los procuradores también indicó que iba "más lento de lo normal" y sufrió algunos bloqueos momentáneos a lo largo de la mañana.

Junto al mayor número de notificaciones, ayer, como es habitual, hubo un aluvión de solicitantes de justicia gratuita debido a que la oficina del Colegio de Abogados que atiende a los demandantes de letrados de oficio cierra en agosto. Y fueron varios los juzgados que ya empezaron a señalar juicios, en jurisdicciones como penal o social.