Las Islas Cíes ya están preparadas para el inicio de la temporada de verano. Mañana arrancan los viajes diarios al archipiélago vigués, que se extenderán hasta el mes de septiembre. Los visitantes deberán llevar, como ya sucedió en Semana Santa y en los fines de semana de mayo, la nueva autorización autonómica que emite la Dirección Xeral de Patrimonio Natural y con la que se pretende evitar la sobreventa de billetes detectada el pasado verano. Hasta la fecha, cerca de 13.000 personas (12.932) han conseguido el permiso para viajar durante el mes de junio a la joya de Illas Atlánticas. La Xunta de Galicia comenzó a tramitar estas autorizaciones hace poco más de dos semanas y solo se pueden solicitar con treinta días de antelación. De esta manera, aquellos turistas que quieran planificar sus viajes para julio, agosto o septiembre deberán esperar para poder obtener el permiso de la central de reservas.
Por ahora, ninguno de los días de junio está completo y la web autorizacionillasatlanticas.xunta.gal todavía permite viajar durante cualquier jornada. Una vez conseguido, los usuarios deberán adquirir el billete clásico con una alguna de las compañías que cubren la ruta hasta las Cíes. La autorización es imprescindible para poder desembarcar en el archipiélago vigués. Personal de Patrimonio Natural y del Parque Nacional verificarán la autenticidad de los pases a pie de puerto y en el propio muelle de Rodas. La Consellería de Medio Ambiente también quiere implantar el cupo de visitantes en Ons, aunque en este caso la medida deberá esperar, al menos, hasta 2019.
Junio es históricamente el primer gran mes de visitas del año. En 2015, por ejemplo, llegaron a las Cíes algo más de 47.000 personas. Un año después la cifra bajó hasta las 36.000 pero en 2017 se volvieron a rozar los 50.000 usuarios, lo que deja una media de algo más de 1.500 visitantes al día. Hasta ayer mismo tenían permiso alrededor de 13.000, aunque la novedad del sistema y el mal tiempo previsto para los primeros días han ralentizado la demanda. Lo normal es que conforme avance el mes los números se parezcan más a los de los años anteriores.
Este nuevo mecanismo busca impedir las triquiñuelas de las navieras durante los últimos veranos y que vivieron su peor episodio el pasado 20 de agosto. Aquel día, trabajadores del Parque Nacional, apoyados por agentes de la Policía Nacional, Guardia Civil y Policía Local, impidieron el desembarco en Rodas de miles de personas con billete una vez que ya se había superado el cupo máximo de visitantes diario -establecido en 2.200 personas y 800 campistas-. Dicha acción se saldó con una multa del Ejecutivo autonómico contra Mar de Ons S.L., Illa de Ons S.L. y Tour Rías Baixas S.L. por un valor de 930.000 euros. Además, el Ministerio Fiscal se querelló en marzo contra las mismas empresas al advertir falsedad y estafa.
Horario de verano
Durante las últimas semanas las navieras y el Gobierno gallego estuvieron debatiendo sobre los horarios de la campaña de verano. A mediados de mayo se alcanzó un acuerdo que asignó un máximo de cuatro horarios por embarcación al día. Además, los atraques en el archipiélago pasan de los 48 de 2017 a los 43 previstos para este año. En el reparto definitivo Mar de Ons se hizo con 15 horarios, Nabia con 8 y Rías Baixas, Tours, Bahía y Cruceros y Turimanes con 4. Los mismos estarán operativos a partir del 24 de junio.
Lo que debería estar una vez finalicen los viajes en temporada alta es el nuevo Plan Rector de Uso y Gestión (PRUG) del Parque Nacional de Illas Atlánticas, que establece un programa de actuaciones para la próxima década por un valor de 25 millones de euros y que prevé reducir la capacidad del camping en 200 personas.
