Los primeros locales de Montero Ríos expedientados por anclar los toldos de sus terrazas a edificios históricos sin ningún tipo de permiso municipal atienden el requerimiento de Urbanismo y se adaptan a la normativa vigente. La última Gerencia del mes de septiembre abrió expediente sancionador a cuatro establecimientos por irregularidades en la distribución y las cubiertas de sus terrazas. El Concello les otorgaba un plazo de un mes exacto desde la notificación para desmontar las estructuras ilegalizables y optar por modelos menos invasivos que no dañaran el patrimonio y permitieran el paso de los peatones y la limpieza de la vía pública.

Dos meses después de comunicarse los apercibimientos, los inspectores municipales han corroborado que el último de los cuatro locales que quedaba por adaptarse también ha sustituido sus toldos fijos atornillados a la pared de piedra por un doble carril de sombrillas unidas en la parte central para evitar la lluvia y mantener el confort de los clientes.

De esta forma, los locales evitan el pago de las multas de entre 1.000 y 10.000 euros as las que se exponían por incumplir la normativa de terrazas y, en algunos casos, por actuar sobre edificios que requerían informe favorable de la Comisión de Seguimiento del Plan Especial de Elementos a Conservar (PEEC) y en uno de los casos, el más grave, por anclar una estructura fija a un inmueble con protección integral.

Los hosteleros alegaron en todos los casos que se trataba de estructuras móviles y desmontables, pero los técnicos de Urbanismo desmontaron esta explicación concluyendo que las cubiertas de la zona de Montero Ríos "tienen vocación de permanencia toda vez que se encuentran ancladas a la edificación y no parece posible retirarlos fácilmente". Rechazaron además la propuesta de legalizarlos bajo la figura de "marquesinas", por lo que hace dos meses se comunicaron las primeras sanciones contra locales de hostelería por este motivo pese a que el asunto había llegado hace meses al Pleno de Vigo y llevó al gobierno local a anunciar la nueva ordenanza de terrazas que ahora ultima.

El sector lleva tiempo demandando unas nuevas reglas de juego que les otorguen seguridad jurídica y que se apliquen por igual en todo el municipio.