Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Gradiant y una firma catalana desarrollan un sistema de voto electrónico más seguro y ágil

El centro tecnológico y la empresa Scytl, que realizó el recuento de las generales de 2015, colaboran en un proyecto para garantizar la privacidad de estos procesos en la nube

Daniel Rodríguez y Juan González

El centro tecnológico Gradiant y la empresa Scytl desarrollan un nuevo sistema de voto electrónico más seguro y ágil que permitirá almacenar y gestionar los datos confidenciales de los usuarios en la nube y contabilizar los resultados con mayor rapidez. La compañía catalana, que compite a nivel internacional, realizó el recuento de las penúltimas elecciones generales en España y participa de forma activa en procesos plebiscitarios de Suiza, además de aportar soluciones para administraciones o empresas de EE UU, Canadá o Australia.

El proyecto Black ICE, que tendrá listo su primer prototipo a finales de este año, utiliza los dispositivos de hardware criptográfico HSM, los mismos que en los cajeros autentifican las claves de nuestras tarjetas cada vez que retiramos dinero. "A partir de estos módulos construimos una plataforma de voto electrónico más segura que puede ser utilizada en diferentes contextos, incluso como servicio en la nube, y que funcionaría como una caja fuerte que almacena las claves y a la que nadie puede acceder", explica Daniel Rodríguez, responsable de la ejecución de la iniciativa en Gradiant.

Casi una veintena de expertos del centro vigués y de la empresa catalana trabajan en esta solución que también permitirá contabilizar los votos en la nube, un proceso que hasta ahora resultaba imposible con todas las garantías de privacidad.

"Al final de la votación aíslan físicamente el servidor en una habitación. Cada miembro del comité electoral tiene una parte de una clave secreta que deben unir y entonces se realiza el recuento informático de los votos electrónicos. La tecnología de Gradiant permitiría completar todo el proceso con normalidad en la nube", destaca Rodríguez.

"El voto electrónico todavía no es posible en España porque no está legislado como en Suiza. Se trata de avanzar en la confianza digital para que los gobiernos vean que estas herramientas son seguras y apuesten por ellas", apunta Juan González, responsable de Seguridad y Privacidad de Gradiant.

Los investigadores vigueses implementarán en los dispositivos HSM protocolos criptográficos de seguridad que harán posible un sistema de voto electrónico y que la empresa Scytl pueda ofrecer a sus clientes un servicio on line. "Estos módulos son muy caros, pero no tendrán que adquirirlos para almacenar las claves de los votantes, sino que pagarán por su uso", destaca Rodríguez.

"Cuando en el futuro el voto electrónico se utilice, por ejemplo, en unas legislativas probablemente se usarán las infraestructuras propias de los estados, no la nube. Nuestra tecnología se podrá utilizar en diferentes contextos,", añade González.

El proyecto Black ICE está cofinanciado por los fondos FEDER y el Ministerio de Economía. Arrancó el año pasado y finalizará en 2018, cuando estará listo un segundo prototipo. "Y ya se probará en un entorno más real, puede que incluso con votantes", comentan los expertos vigueses.

Los desarrollos en los que trabaja Gradiant también se podrían aplicar a otros entornos en los que se maneja información sensible como el sanitario o el financiero. "El centro está abierto a colaborar con empresas de estos ámbitos. Cada vez accedemos a más servicios de forma digital y se genera un mayor volumen de datos que hay que proteger", recuerda Juan González.

"La tecnología facilita el progreso pero lleva asociadas determinadas amenazas que pueden poner en riesgo el modelo de negocio de una empresa o incluso la forma de vida de nuestra sociedad", añade.

De ahí que la seguridad sea uno de los "pilares básicos y estratégicos" del centro tecnológico vigués, el tercero en el ámbito TIC de toda España y donde ya trabajan 109 profesionales, la plantilla más elevada desde su apertura en 2008. Y tienen previsto acabar este año con una facturación superior a 5,4 millones de euros.

Daniel Rodríguez - Proyecto Black ICE

"Funciona como una caja fuerte que almacena las claves y a la que nadie puede acceder"

Juan González - Responsable de Seguridad

"Se trata de avanzar en la confianza digital y que los gobiernos apuesten por estas herramientas"

Una solución para el censo emigrante gallego

  • Suiza es pionera en legislar e implantar el voto electrónico en algunos de sus cantones. De hecho, la empresa Scytl, en colaboración con Swiss Post, va a permitir que por primera vez más del 50% de los votantes de los cantones puedan emitir su sufragio a través de internet cumpliendo las estrictas normas de seguridad y verificabilidad establecidas por la Cancillería Federal. Hasta ahora, solo podía participar de forma telemática el 30% de la población del país con derecho a voto. Desde Gradiant plantean que la solución tecnológica en la que trabajan junto a la empresa catalana podría facilitar y agilizar la participación de los casi 450.000 gallegos inscritos en el censo de residentes ausentes (CERA) en las últimas autonómicas. El centro vigués se ha aliado con una empresa de referencia. En nuestro país, además del recuento de las generales de 2015, también ha implementado soluciones en la Administración catalana o en la red de franquicias de McDonalds. Y en el exterior ha llevado a cabo proyectos de modernización electoral en EE UU, incluidas las últimas presidenciales.

Compartir el artículo

stats