La playa de Samil despertaba hoy domingo especialmente concurrida, incluso después de que ayer miles de personas se vieran sorprendidas por la bandera roja tras localizarse una mancha, al parecer, causada por un vertido de petróleo de un barco.

En el arenal conviven desde temprano un equipo de limpieza con una veintena de trabajadores que, según sus propias palabras, retiran el "chapapote", con muchos usuarios que buscan combatir el calor de la jornada.

Aunque los carteles y la bandera amarilla invitan desaconsejan el baño, han sido muchos lo que, por su propia voluntad, se han metido en el mar para refrescarse. Sin embargo, las condiciones continúan sin ser óptimas.

La situación del arenal se ha convertido en el tema de conversación durante la mañana, especialmente cuando los bañistas tratan de retirar las manchas de sus pies a causa de los residuos que todavía se mezclan con la arena.

El vertido

Tras unos primeros momentos de confusión, se ha determinado que la mancha procede de un vertido de petróleo de un barco.

Ayer, la playa estaba repleta cuando a las siete y media de la tarde fue necesario desalojar a cientos de personas del agua y prohibir de forma temporal el baño en todo la playa para evitar incidentes.

Mientras los trabajos de limpieza continúan, se sigue a las espera de saber cuándo la playa quedará de nuevo oficialmente abierta al baño.