Felipe Estévez, director y cofundador de Mayeusis, quiso compartir el premio de Vigués Distinguido otorgado a la institución en su treinta aniversario con la ciudad de Vigo y los miles de vigueses -por el centor han pasado más de 10.000 alumnos- que les "han dado la vida con su confianza". También a los profesores, personal no docente y equipos directivos de Mayeusis en Vigo y Pontevedra, "los vigueses distinguidos anónimos".

- ¿Cómo recibió la noticia?

-La propuesta la había preparado en secreto el equipo con motivo del 30 aniversario sin yo saberlo y me enteré en el Concello, a donde había ido a la presentación del proyecto de la Panificadora. Fue una gran sorpresa

- Están inmersos en la celebración de su treinta aniversario, ¿cómo han sido estas tres décadas?

-Como cualquier proyecto que nace con alma y corazón, con pasión de hacer el camino y haciéndonos adultos al caminar.

- Acaban de estrenar titulaciones de grado superior, ¿es ese el gran hito de la escuela?

-Nuestro camino como el de cualquier peregrino está lleno de etapas y todas tienen su misterio y su belleza. El superior es la última etapa, sí, pero no más importante que el Proyecto Arrullo para embarazadas o el primer libro en gallego hace treinta años, "A gaita no eido da música", o el primer campamento musical de Galicia, o la primera clase para bebés con Edwin Gordon, o ser el primer centro de España autorizado en ballet. Pero si hay algo que destacar es que Mayeusis existe porque así lo deciden cada curso los vigueses y viguesas. Por eso nuestro agradecimiento por encima de todo es a esta ciudad y vivimos en clave a sus valores: fiel, leal, valerosa y siempre benéfica.

- ¿Qué retos tiene para el futuro?

-Los retos son pasar de ser jóvenes adultos a adultos jóvenes, y poder desarrollar el potencial al máximo siendo útiles a la sociedad con nuestros valores. Y de forma inmediata poner en marcha el Superior y a la vez el Proyecto Arrullo para embarazadas, además de preparar el "Mais, 30", lema de nuestro aniversario.

- Hablan a menudo de los Principios Mayeusis, ¿en qué consisten?

-Mayeusis nace para acompañar a ser felices y por eso su forma de hacerlo es a través de la música. La música nos hace iguales, es el amor en su expresión más auténtica y la música es Ubuntu: no tiene sentido llegar a ser un gran instrumentista por ti solo. Mayeusis nace para recordar a todos el derecho a ser feliz y que solo se puede ser feliz cuando toda la orquesta y coro suenan afinados porque al final, y este es el secreto que queremos comunicar, es que somos música y queremos ayudar a que cada uno descubra su canción, su nota, su danza, pues ésta es única.

- ¿Cómo es la relación con el Conservatorio?

-Los hechos definen más que las palabras. Han sido padrinos de promociones de Mayeusis, el actual director del conservatorio superior Esteban Valverde o el anterior, Roberto Relova. Estamos orgullosos de nuestros conservatorios y de que en ellos estén antiguos alumnos y profesores. Nuestra manera de ver es siempre en clave de ciudad, y siempre inclusiva y colaborativa, creemos que Vigo cuenta con mucha fuerza musical.

- ¿Todos los niños esconden un artista en su interior?

-Hay que romper el tópico de que hay que tener talento para hacer música. Igual que no hay talento para hablar o escribir, la música forma parte de la esencia del ser humano, está en nuestro ADN, así que todos estamos llamados a desarrollar ese ADN, a ser artistas. A partir de ahí puedes elegir lo que quieras, incluso ser profesional. Aspiramos a que todos los niños que vengan aquí puedan descubrir que la música forma parte de su vida para siempre, por lo tanto es un camino para ayudarle a ser feliz. Picasso decía que "todos los niños valen para artistas, el problema es cómo seguir siendo artistas al crecer". Así que este es un valor mayéutico, nosotros solo tenemos que acompañar al niño a que dé a luz lo que ya es, lo que tiene dentro.