Gobierno y oposición se enfrentan por la liquidación presupuestaria del 2016 y se acusan mutuamente de "maquillar" las cifras oficiales. La portavoz municipal del PP, Elena Muñoz, cifró esta mañana en 26 millones de euros la cuantía que quedó sin ejecutar del pasado ejercicio criticando la "falta de capacidad de gestión" de los socialistas y asegurando a su vez que se han llegado a acumular 97 millones de euros de fondos líquidos en los bancos. El encargado de responderle fue el alcalde, Abel Caballero, que insistió en que el dinero que queda sin ejecutar como ocurrió con la grada de Río de Balaídos retrasada por un recurso se ejecuta este año.
"En Vigo gestionamos maravillosamente bien. En todas las ciudades quedan partidas sin ejecutar y por eso a través de la FEMP yo personalmente defendí con el ministro de Hacienda que se pudiera destinar el superávit a inversiones cuando en casos como el nuestro no tenemos deuda", explicó el regidor, que señaló que parte del dinero que se ahorra a lo largo del ejercicio no se puede destinar a gasto dentro de ese mismo curso económico porque lo impide el techo de gasto que fija el Estado para las administraciones locales.
Pero la lectura hacen los populares es radicalmente contraria. "La realidad se impone y la ejecución de 2016 es un absoluto fracaso de gestión de un gobierno que lleva al Concello a una situación preocupante y mantiene dinero inservible en los bancos cuando hay necesidades sociales por cubrir", denunció Muñoz.
