Bronca en el último pleno del año. Una veintena de vecinos de Coia interrumpieron la sesión diez minutos con su protesta contra la instalación del Bernardo Alfageme en la rotonda de Castelao. Otro grupo se quedó fuera por falta de espacio en el salón. La Policía Local custodiaba la sesión y realizó cacheos a los asistentes.

En medio de esta calma tensa transcurrió el debate hasta que se llegó a la moción del BNG exigiendo al gobierno vigués que se reponga la vegetación en la rotonda y no instale allí el barco. En ese momento el grupo irrumpió con gritos de "Non ao barco" y "O pobo, unido, xamais será vencido". Apenas era audible el reproche de Iolanda Veloso al PSOE por no ejecutar el acuerdo plenario de octubre por el que PP y BNG se oponían a la instalación del Alfageme en tierra. El PP se negaba a continuar con el debate en medio de un enfrentamiento entre detractores y partidarios del proyecto y criticó al alcalde por "gobernar de espaldas a la ciudadanía".

Abel Caballero intervino para insistir en que la protesta surgía de "reventadores profesionales de la CIG" y advirtió que "son solo doce de un total de 300.000 ciudadanos". Los emplazó al 24 de mayo: "La ciudad apoya masivamente el proyecto y se pronunciará con claridad en las elecciones", concluyó. El sindicato aseguró por la tarde que ninguno de sus miembros asistió al pleno.