Cristina Mejía y Jose Barcia lo tienen claro: "Es duro criar a tantos hijos, mentiríamos si dijésemos lo contrario. Pero también es un reto apasionante en el que te dejas la piel y en el que a medida que pasa el tiempo ves que ha valido la pena". Con 39 y 40 años respectivamente, este músico y esta gobernanta de un centro educativo tienen seis hijos: Clara (8), Belén (11), Santiago (13), Sofía (16), Cristina (17) y Ana (18). ¿Cómo conjugan la vida laboral con la familiar? "Yo no soy Superwoman y mi marido no es Superman", explica Cristina, que concreta que afrontan sus respectivos compromisos laborales y profesionales "con la responsabilidad necesaria para cumplirlos". "Procuramos que todos atiendan a sus encargos para mantener las cosas medianamente bien, sobre todo porque no tenemos ayuda extra en casa. La implicación en las tareas del hogar es toda una escuela de virtudes que fomentamos día a día".

Estos orgullosos progenitores tienen claro que el tema económico "puede ser un factor esencial" para sacar adelante a una familia numerosa, pero también concretan que "se aprende a vivir con lo necesario y a prescindir de muchas cosas". "Te aprietas el cinturón, desarrollas la creatividad en el comer y en el vestir, creas redes de ayuda con otras familias: regalas ropa, libros, cedes material que no necesitas y también te beneficias del que te dejan", indican.

Entienden que de esta forma aportan "un elemento humano esencial para el desarrollo de la sociedad y del país", por lo que creen que lo más complicado de tener este número de hijos es "no contar con el apoyo del Gobierno, vernos desamparados por las leyes, discriminados de cierta manera y recibiendo "ayudas" ridículas".

La familia Barcia Mejía se mueve en un círculo de personas en las que sí hay varios casos de familias numerosas, pero entiende que hoy en día no haya tantas como antaño y señala tres factores claros: la crisis, el pensamiento de las parejas y las dificultades de la conciliación laboral y familiar. Sin embargo, ellos animan a los jóvenes a que no tengan "miedo". "Los hijos son un don, un regalo que no se puede ni se debe planificar sino simplemente aceptar. Son una tarea que pone en marcha el maravilloso engranaje del amor", explican los padres.

Y los hijos, ¿qué tienen que decir sobre tener tantos hermanos y hermanas? "Lo mejor de ser familia numerosa es que aprendes a conformarte con poco", opinan Clara, Belén, Santiago, Sofía, Cristina y Ana, que sienten que de esta forma valoran más las cosas y aprenden a "disfrutar con lo sencillo, a celebrar como extraordinarias cosas que para otras personas no lo son".

En cambio, Cristina y Jose creen que lo más positivo es "construir día a día unos lazos de amor que se consolidan, a pesar de las broncas y los roces propios de la convivencia". Por todo ello, destacan por encima de todo tres características que deben darse en toda familia con tantos miembros: "servicio a los demás, el perdón y la gratitud".

Su último consejo: "Es importante no sucumbir ante los obstáculos que presenta el mundo actual sobre todo en lo que supone sacar adelante a un hijo".