Cinco meses es el plazo que tienen los empresarios del Casco Vello para que las fachadas de sus negocios "armonicen" con el emblemático entorno arquitectónico. La Gerencia de Urbanismo ha recordado por carta a los titulares de 400 establecimientos que antes de julio su aspecto exterior debe cumplir las directrices contempladas en el Plan Especial de Protección y Reforma Interior (Pepri) de la zona histórica.

Las pautas que recoge este documento urbanístico afectan a todo el "escaparate" de la empresa o comercio. Desde las dimensiones, color o letra de los rótulos que anuncian su actividad hasta el espacio que deben ocupar los toldos e incluso su formato. "Se trata de homogeneizar la imagen que ofrecen los negocios de manera con no distorsione ni desvirtúe el bello entorno histórico", argumentan fuentes de Urbanismo.

Como ejemplo de alguna rotulación condenada a desaparecer en aplicación de esas directrices del Pepri es la que muestran en sus respectivas fachadas las sucursales de los bancos BBVA o Santander o la asegurada AXA en la plaza de O Berbés. En concreto estas empresas ya han sido requeridas por Urbanismo urgiéndoles a retirar su rotulación publicitaria. Estos establecimientos disponen de un plazo todavía más corto para retirarla. Las edificaciones sobre las que se asienta se incluyen en un plan específico que pretende embellecer la pintoresca plaza y que también contempla ayudas a los particulares para rehabilitar sus viviendas.

Del articulado del Pepri dedicado a la instalación de "Banderines y rótulos" tres cláusulas son muy claras respecto a lo que se prohíbe. No se permite "el empleo de materiales de PVC y los rótulos luminosos o de colores". En este sentido recuerda la prohibición de instalar cualquier clase de cartel o anuncio en las plantas altas. Y en tercer lugar se impone el uso de "materiales nobles (como la madera, el acero inoxidable o galvanizado, cobre, vidrio o similares) con acabado natural, barnizado o pintado".