La crisis reduce en casi 40.000 coches el tráfico diario que soporta el casco urbano

La crisis, la escalada de los precios del carburante o el aumento de la tasa de paro contribuyen a dar un respiro a los problemas circulatorios en la ciudad. La Intensidad Media Diaria (IMD) de tráfico que soportan las calles cae en picado en los últimos cuatro años. De los más de 535.000 turismos que se contabilizaban a diario en Vigo en 2007, se ha pasado a los 497.000 de la actualidad. Una diferencia de casi 40.000 coches menos que refleja una importante caída del número de desplazamientos, tanto por el interior del casco urbano como de entrada a Vigo.

Gran Vía continúa siendo el vial que mayor carga de vehículos soporta. La media de coches que circulan a diario este año entre Plaza de América y Urzáiz roza los 97.000. Si bien, es también una de las calles en las que más se ha notado la disminución de turismos provocada por los efectos de la crisis económica. Respecto a hace cuatro años circulan ocho mil turismos menos por el que es uno de los principales nudos urbanos de Vigo.

Los más de 2 kilómetros de túnel de Beiramar registran el índice de vehículos más importante de Vigo después de Gran Vía. Actualmente circulan por el subterráneo una media de 17.000 automóviles en cada sentido. La sangría de desplazamientos respecto a 2007 también es notable. Antes de la crisis lo llegaron a utilizar hasta 25.000 turismos en dirección a O Berbés; y 22.000, hacia Areal. El departamento municipal de Tráfico justifica también este descenso a un cambio de hábitos. "Desde 2008 se registra una progresiva utilización de la VG-20 (el vial que une el segundo cinturón con Bouzas) que ha contribuido a reducir el número de vehículos desde y hacia el túnel de Beiramar", argumentan.

Pero la disminución global de coches que atraviesan la ciudad no se extiende a todos los viales. "Las variaciones en la circulación de vehículos no solo dependen de la situación socioeconómica, sino también de otros factores como una mayor dotación de infraestructuras, la mejora de calles o la construcción de aparcamientos, que provocan un cambio de hábitos e itinerarios", explican desde el departamento de Tráfico. En este sentido, ponen como ejemplo la avenida de Arquitecto Palacios que, con casi 22.000 vehículos diarios de entrada a Vigo, registra este año su mayor índice de la historia. "Se incrementó el tráfico desde las obras de remodelación de la avenida de Castrelos –que pasó a ser ascendente hacia Plaza de América– y de la avenida de A Florida y que mejoraron la conexión con el centro", explican.

Pese a que en 2011 el número de coches que circulan por la ciudad a diario es muy inferior a los que lo hacían hace cuatro años, fue en el año 2008 cuando se produjo la mayor sangría. De hecho, a los efectos de la crisis económica se sumaron entonces los planes masivos de humanización que provocaron el cierre temporal de decenas de calles y que llevaron a muchos vecinos a prescindir del vehículo privado para moverse por Vigo. La intensidad media diaria en ese ejercicio llegó a ser 64.000 vehículos menos respecto al anterior ejercicio.

En este último periodo el transporte público se vio beneficiado, tanto por la disminución del tráfico en el casco urbano como por el aumento de viajeros. Mientras en 2008 se producía la mayor caída de tráfico circulatorio, los autobuses de Vitrasa registraban un aumento de más de 400.000 viajeros. Si bien, este incremento no se repitió en los dos siguientes años, cuando al mismo tiempo que disminuía el tráfico de turismos, lo hacía también el número de usuarios del bus urbano, que se quedó sin 619.659 clientes en 2009; y 296.442, en 2010.

Según los datos de Tráfico, 2011 podría marcar un punto de inflexión al crecer la intensidad media diaria en 5.000 vehículos respecto al año pasado; y aumentar también el número de usuarios del bus urbano, que se incrementó en casi 300.000 en los primeros meses de este año.