Menos de diez minutos bastan a la práctica totalidad de los psicotécnicos para realizar una entrevista y las pruebas de visión, audición y reflejos necesarias para la renovación del carné de conducir. Pero algunos apenas dedican un minuto: el tiempo justo para expedir el certificado y cobrar por una consulta en la que no se hace ni examen médico ni psicológico. Esta es la situación con la que se encontró un conductor que el pasado verano acudió a un psicotécnico vigués. Sin ser sometido a ningún tipo de reconocimiento, el centro determinó que era apto para seguir al volante.

Ante la falta de la exploración exigida para poder expedir el certificado médico de aptitud –de vital importancia en el caso de aquellos conductores con problemas psicológicos y en especial en los de avanzada edad–, decidió denunciar los hechos. La Fiscalía de Seguridad Vial de Vigo, coordinada por Carlos Gil, abrió una investigación para comprobar la veracidad de las presuntas irregularidades cometidas por los profesionales del centro médico y, tras meses de pesquisas, el caso fue denunciado ante el Juzgado de Instrucción Número 3. Se trata del único psicotécnico llevado a un juzgado en España por un presunto delito de falsedad documental.

Los hechos denunciados se remontan a agosto de 2010. Según consta en la denuncia remitida al juzgado, el centro de reconocimiento contrató durante ese mes a una persona sin ninguna habilitación para que atendiera sola a todos los clientes y les entregase el certificado psicotécnico para la renovación del carné de conducir. Ningún médico, según la versión del denunciante y el testimonio de una decena de conductores que acudieron a renovar el permiso a ese centro, estuvo presente en el momento de la consulta. Es más, la Fiscalía de Seguridad Vial hace constar que el equipo facultativo dejaba firmados en blanco los impresos para que fueran entregados a los clientes.

La investigación revela que al menos 200 certificados fueron emitidos durante ese mes de agosto sin asistencia médica. De confirmarse esta cadena de presuntas irregularidades, los tres imputados en el caso –la directora del centro, el psicólogo y la joven contratada para expedir psicotécnicos pese a no estar habilitada– se enfrentan a penas de prisión de hasta 12 años y a una multa por falsedad documental.

Por el momento, el equipo del centro ya ha tenido que hacer frente al caso vía administrativa con el pago de tres multas de 5.000 euros cada una por la emisión de tres certificados de forma fraudulenta.

Hace apenas dos meses, la Fiscalía impulsó una decena de medidas para perseguir vía penal aquellas conductas al volante que supusieran un riesgo para la seguridad vial y que hasta el momento solo se perseguían con sanciones económicas. Entre ellas, se propuso vigilar con lupa a los psicotécnicos, ya que había percibido la existencia de algunos centros que "atienden solo al negocio" y "no se preocupan de que los examinados, en especial las personas de más edad cumplan los requisitos exigibles para la obtención de la renovación del permiso cumplan con los requisitos exigibles para la obtención de la renovación del permiso".

En Galicia, el 13,6% de los conductores censados superan los 65 años y la Fiscalía de Seguridad Vial tiene la intención de pedir penas de prisión para los responsables de los centros médicos si se produce un accidente grave en el que la causa sea imputable a una deficiencia notoria del conductor y éste haya sido sometido recientemente a un examen psicotécnico.

Advertencia de la patronal

Hace tan solo un año saltó la alarma en Tráfico. El 99% de los psicotécnicos no hacían un examen riguroso, según advertían desde la Asociación de Centros de Reconocimiento de Conductores (CRC). Esta situación llevó a la DGT, en colaboración con el Ministerio de Sanidad, a elaborar un reglamento que finalmente estableció un protocolo de exploración médico-psicológica común y que además obliga a los psicotécnicos a conectarse con Tráfico vía telemática.

Con el nuevo sistema, la DGT se propone reglar el método de exploración, pervertido por la competencia del sector y la falta de vigilancia ya no solo desde las Jefaturas de Tráfico, sino también desde las propias consejerías de Sanidad.

El presidente de la asociación española de psicotécnicos (CRC) y responsable del Centro Médico Coruña, Juan Luis Arévalo Blázquez, admite que la situación ha mejorado tras la aprobación del reglamento. La parte del protocolo de exploración entró en vigor en marzo de 2010 y la conexión vía telemática con Tráfico, en noviembre. Aun así, advierte que todavía hay un 30% de psicotécnicos que no hacen un reconocimiento exhaustivo a la hora de tramitar la renovación de un permiso de conducir.

En el protocolo de exploración autorizado por la DGT se incluyen no solo exámenes oftalmológicos, auditivos y psicológicos, sino también una exploración con electro para los conductores con problemas cardiovasculares como la hipertensión. Los 750 centros asociados a la entidad, 90 gallegos, defienden la implantación de un examen médico y psicológico completo, que supondría dedicar al chequeo de cada conductor menor de 45 años entre 20 y 30 minutos y a los mayores de 70, hasta tres cuartos de hora.