La presidenta del mercado de Bouzas y propietaria de la carnicería que está instalada en esta plaza, Pilar Cambeiro, reconoce que su puesto es uno de los más exitosos.“El pescado está muy caro y se compra menos”, lamenta. Esta comerciante explica que adquiere ella misma el ganado, lo selecciona, y elabora la carne cada día, ya sean pinchos, zorza o hamburguesas.“ No hay color; no sé cómo en los supermercados la carne picada de bandeja está tan roja, lleva conservantes y colorantes porque si no al día siguiente estaría negra.Yo la pico en el momento de vendérsela al cliente, al igual que las pechugas de pollo, que las parto cuando me las piden”, desvela Pilar, quien defiende la calidad de los productos de sus compañeros.“ Las verduras y la fruta casi todas son de casa”.