Tráfico prohíbe estacionar motos en todas las calles reformadas y sólo crea 50 plazas más

Entra en vigor la prohibición de estacionar motos en vías semipeatonales. Desde el miércoles, la Policía Local puede multar a los conductores que dejen sus vehículos en calles humanizadas y reguladas por un bando específico aprobado por el anterior gobierno en 2006. Trabajadores y comerciantes que hasta ahora aparcaban en Marqués de Valladares, Plaza de Compostela o Progreso, deberán desplazarse hasta los aparcamientos oficiales habilitados por el Concello en Puerta del Sol, Rosalía de Castro o el Arenal si quieren evitar sanciones.

La Concejalía de Seguridad y Tráfico instaló hace dos días señalización vertical que informa a los conductores de la prohibición expresa de ocupar las aceras de calles catalogadas con prioridad para peatones, desde Churruca hasta Urzáiz, pasando por María Berdiales. Se intenta compensar la reducción de espacio para motocicletas -los coches ya no podían aparcar- habilitando 50 nuevas plazas en las inmediaciones de las calles donde ahora no se puede estacionar en las aceras.

La prohibición fue aprobada por la anterior corporación en el año 2006 a través de un bando, sin conocer que su rango es inferior a la ordenanza de 1993 y que podría quedar invalidado. Tal y como adelantó FARO, hasta hace un mes la Policía Local aplicaba el bando sin cuestionarse su legalidad, pero tras hacerse público el problema de incompatibilidades con el reglamento general, el concejal de Seguridad y Tráfico, Xulio Calviño, paralizó las multas hasta colocar los letros informativos esta misma semana.

Tras un mes de tregua de tregua, las nuevas señales dan cobertura a la aplicación del bando y obligarán a cambiar de hábito a los más de 28.000 motoristas dados de alta en Vigo. Las modificaciones afectan especialmente a los vigueses que trabajan o realizan gestiones en el entorno del Mercado do Progreso y el Arenal, donde por las mañanas decenas de motocicletas estacionan en las aceras de Montero Ríos, República Argentina o Vázquez Varela.

Conscientes de las dificultades para encontrar aparcamiento y con tan sólo 330 plazas disponibles en el casco urbano para casi 30.000 motos, el actual equipo de Tráfico anunció el 21 de mayo una primera fase de ampliación con 138 aparcamientos, a la que siguió esta semana una segunda con 50 nuevas plazas : 20 en el muro del edificio de la Xunta; diez en los jardines del Arenal, y otras tantas en Conde de Torrecedeira y Rosalía de Castro.

Juntan suman 188 plazas y suponen un incremento de un 58 por ciento con respecto a las 330 disponibles hasta ahora. Son una mejora pero, a todas luces, siguen siendo insuficientes para dar servicio a las miles de motocicletas que circulan a diario por Vigo.

El nuevo régimen de estacionamiento en las vías semipeatonales es ya efectivo pero, al igual que las plazas reguladas por la XER y de minusválidos, podrían sufrir cambios tras la aprobación de la nueva ordenanza de tráfico, prevista para final de este año.