Tras la intensa batalla política entre los partidos de la Corporación Local, finalmente la Rede de Mulleres contra los Malos Tratos será galardonada con la Medalla de la Ciudad. Rosa Fontaíña, coordinadora de la agrupación, asegura que no la recogen con la "ilusión que deberíamos" y manifiesta, decepcionada, el sabor agridulce con el que acogerán el premio. "Se podía haber evitado", afirma.

- ¿Cómo reciben esta distinción tras la polémica que ha rodeado a la Medalla de la Ciudad?

- Muy decepcionados. La confrontación política que se ha gestado para la elección de los premiados ha sido una vergüenza. En la Rede estamos muy disgustados por el follón que se montó y en el que indirectamente nos han involucrado.

- Afirma que perdieron la ilusión. ¿Con qué ánimo recogen entonces el premio?

- Nuestra ilusión está mermada por todo lo acontecido, pero sabemos que hay una gran parte de la ciudadanía que reconoce nuestro trabajo. El premio es muy importante para nosotros y, aunque pueda parecer muy arrogante, lo recogemos porque sabemos que lo merecemos.

- ¿Se plantearon en algún momento renunciar a la Medalla de la Ciudad?

- Tras el lío político que se montó convocamos una asamblea extraordinaria para debatir sobre este tema. Allí hubo miembros de la agrupación que plantearon esta posibilidad, pero al final, y por consenso, decidimos recogerla. Los que estaban en contra argumentaban que se había cuestionado nuestro trabajo y, aunque es cierto que parecía que nosotros habíamos generado el conflicto, también sabemos que somos merecedores del galardón, y por eso no hemos renunciado a él.

- Se pasó de cancelar la entrega del premio a otorgar dos Medallas. ¿están a favor de `compartir´ el premio?

- No estamos en contra de `compartirlo´ con la Policía Local, pero creemos que resta consideración hacia la Rede el entregar dos premios. Pensamos que este año era el idóneo para reivindicar el trabajo en favor de los derechos de las mujeres y por eso nos disgusta todo lo acontecido y la decisión final.