La alcaldesa Corina Porro hizo ayer un llamamiento a la "responsabilidad" de los vecinos de la parroquia de Coruxo, afectados por el mal funcionamiento de la depuradora del Lagares, que anunciaron movilizaciones y boicots durante los actos de la campaña electoral, para manifestar su oposición a la construcción de una nueva planta en la misma zona.

Porro recordó que la nueva macrodepuradora supone "la mejor solución" para la zona, y que la planta contará con las "más avanzadas tecnologías", reemplazará a la actual y permitirá, incluso, el aprovechamiento de la superficie para destinar a espacios públicos.

La alcaldesa subrayó que la construcción de esta planta es producto de un acuerdo en el que "Xunta y ayuntamiento van de la mano, y eso es bueno", por lo que volvió a recordar a los vecinos que las administraciones están "haciendo ciudad".

Así, Corina Porro calificó el saneamiento y la depuración como "uno de los problemas más graves" de una ciudad y afirmó que, si se sigue "machacando la ría, no se va a ninguna parte".

Respecto al Plan General, Porro señaló que si la Xunta decide no aprobarlo de manera definitiva una vez corregidas las deficiencias requeridas, será "por imposición de un candidato", que aunque no nombre se refiere al socialista Abel Caballero. Calificó de "grave" esa posibilidad sobre todo, por el importante número de familias que viven en casas ilegales y que el PGOM pretende legalizar.