Galicia incluirá cuatro linfomas y tres cánceres femeninos en la norma de esperas máximas

Las pruebas diagnósticas deberán ofrecerse antes de 45 días y las operaciones en un tope de 60

VIsta exterior de Urgencias del hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo

VIsta exterior de Urgencias del hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo / MARTA G. BREA

Daniel Domínguez

Daniel Domínguez

Desde el año 2018, Galicia cuenta con una norma que impone una espera máxima de atención médica en enfermedades de extrema gravedad. A partir de ahora, ampliará esas 108 dolencias con otras siete. Se trata de tres patologías relacionadas con la mujer (neoplasia maligna de útero, displasia de cuello uterino y displasia vulvar leve y moderada) y cuatro tipos de linfoma (de Hodking, folicular, no folicular y de células TNK maduras).

Así lo aprobó esta mañana el Consello de la Xunta, que mejora así una norma que establece para este más de un centenar de enfermedades un tiempo máximo de consulta de 45 días y de 60 en el caso de las operaciones.

“Con esta ampliación se beneficiarán cerca de 2.000 pacientes”, expuso el conselleiro de Sanidade, Antonio Gómez Caamaño, durante la rueda de prensa posterior al Consello. Alegó que se pretende priorizar así a los pacientes con las patologías más graves o mayores peligros de complicaciones.

De hecho, el Ejecutivo decidió también incluir esas tres lesiones potencialmente malignas del aparato reproductor femenino en la vía rápida del cáncer de endometriosis, que incluye informe anatomicopatológico de la biopsia endometrial, histeroscopia, TAC y pruebas de estadio. En estos casos, se pretende no superar la demora media en 15 días entre la solicitud de atención.

Ya se aplican estas vías rápidas en cáncer de pulmón, mama, colorrectal, próstata, vejiga, de cabeza y cuello, endometriosis y oncohematológico. Desde la entrada en vigor del decreto de esperas máximas, la Xunta cifra en 293.382 personas las beneficiadas.