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Los concellos gallegos, a través de la Federación Galega de Municipios e Provincias (Fegamp), expresaron ayer su disconformidad con el modelo de la Xunta para transformar en gratuitas las guarderías, tanto las privadas como las públicas, que este año, por primera vez, será sin coste alguno para las familias en una iniciativa que la Xunta pretende convertir en permanente, como avanzó el lunes el presidente gallego, Alfonso Rueda. Los municipios entienden que el sistema financiero resulta insostenible a largo plazo ya que los ayuntamientos deben contribuir con fondos propios y reclaman que si el Gobierno gallego quiere implantar la gratuidad en las escuelas infantiles –de 0 a 3 años–, debe aportar fondos a la medida.
La Fegamp considera que la gratuidad perjudica a los ayuntamientos, ya que frente a los más de 300 euros mensuales por niño con los que la Xunta subvenciona a las guarderías privadas, “los centros municipales no recibirán más de 169 euros por el mismo concepto”.
Financiación municipal
Por eso, la organización municipalista –presidida por el socialista Alberto Varela– advierte que la gratuidad de las escuelas infantiles solo será permanente “si el Gobierno autonómico se hace cargo realmente de ese coste” porque, insiste, “muchos de estos centros –95 en total– están sufragados por los ayuntamientos”.
Ante esta situación, la Fegamp cree que el Gobierno autonómico deja “al descubierto” a los centros municipales al destinar solo 5,5 millones de euros a los concellos, mientras que esa partida “para las guarderías privadas ascenderá a 40 millones de euros”.
Riesgo para la continuidad
Los municipios recuerdan que ya habían avisado a la Administración autonómica de que el nuevo baremo podía “hacer peligrar la continuidad de centros”. Según la Fegamp, “no todos los ayuntamientos podrán afrontar los costes equivalentes a las cuotas que hasta ahora aportaba los padres y madres”.
En todo caso, “en consideración a las familias”, la Fegamp asegura que los municipios mantendrán el servicio este curso, pero advierte que será “insostenible en el tiempo” y que si la Xunta quiere la gratuidad permanente deberá aportar más fondos.
Además, la Fegamp censura la “falta de diplomacia institucional” del Ejecutivo gallego por “atribuirse los méritos de la medida en exclusividad” y “no reconocer al municipalismo su aportación”, puesto que las entidades locales sufragan 95 guarderías y una cuarentena de puntos de atención infantil.
