La Xunta endurecerá los tiempos para que los concellos paguen a la administración autonómica su parte de financiación de servicios sociales como centros de día, guarderías o el programa Xantar na Casa, que lleva comida a domicilio a alrededor de 1.600 personas. Los plazos actuales se reducirán un tercio, pasando de tres a dos meses, a partir del año que viene.

Así consta en una modificación normativa incluida en la Ley de Medidas Fiscales y Administrativas tramitada en paralelo a los presupuestos autonómicos de 2022 y conocida coloquialmente como Ley de Acompañamiento.

Un total de 286 municipios están adheridos al Consorcio Galego de Servizos de Igualdade e Benestar de la Xunta, que establece un sistema de cofinanciación de sus servicios. La mitad es abonada por la Xunta; un 25%, por los usuarios; y otro 25%, por los ayuntamientos.

La reducción de los plazos para pagar esas cuotas persigue “el objetivo de avanzar en la sustentabilidad financiera en los servicios que se prestan a través del Consorcio”, alega la Xunta para justificar esa modificación legal.

También se fijará un plazo de seis meses para establecer la liquidación de costes de esas aportaciones, que generó conflictos antes de que en 2017 se suscribiese un nuevo sistema. Ambas partes se enfrentaron por el sistema para medir esas cifras.

El objetivo de esas medidas para por evitar impagos. De hecho, 4,5 millones de euros están pendientes de cobro por parte del Consorcio a los concellos por ejercicios previos a 2017, según consta en la Conta Xeral de la Xunta de 2020. En total, la deuda con este ente por parte de municipios y Xunta asciende a 13,6 millones.