¿Cuánto se paga por los conciertos con la sanidad privada?

Los 45,5 millones que se paga a los centros hospitalarios privados por asumir una parte de la actividad quirúrgica y pruebas diagnósticas de la pública son, en todo caso, solo una parte del total de actividad concertada, que incluye además de la atención hospitalaria distintos programas, desde transporte sanitario, programas de hemodiálisis o servicios de rehabilitación. La suma total supera los 205,5 millones, según los datos del Consello de Contas referidos a 2019 recopilados por la Asociación de Hospitales Privados de Galicia (Ahosgal). Esta cuantía resulta también inferior a los 224,5 millones que se destinaba en 2012.

El grueso de esta partida se destina a la atención hospitalaria (136,1 millones de euros), pero el grueso se lo lleva Povisa, además de 11 millones anuales para el Centro Oncológico de A Coruña. Los 45,5 millones restantes se reparten entre los once hospitales privados de la comunidad, a los que la Xunta deriva pacientes para aligerar las listas de espera. Galicia destina 16 euros per capita a estas derivaciones.

La actividad concertada representa el 4,95 por ciento del gasto del Sergas, pero en concreto los conciertos con hospitales privados, sin incluir Povisa, son solo el 1,1 por ciento.

La inyección pública de dinero supone casi el 20 por ciento de la facturación de estos hospitales privados, sin contar Povisa, que depende en un 75 por ciento de las partidas de la Xunta.

En todo caso, hay variaciones según el centro hospitalario: el Hospital Juan Cardona de A Coruña, por ejemplo, tiene en los conciertos el 40 por ciento de su facturación. Polusa, de Lugo, también ronda este porcentaje. Otros como el HM Modelo, ubicado en la ciudad herculina, sin embargo, apenas obtiene el 7 por ciento de sus ingresos como resultado de las derivaciones.

Tres grandes grupos de salud copan el grueso de la tarta destinada a conciertos. Ribera Salud, propietaria de Povisa, Polusa (Lugo) y el Juan Cardona de A Coruña, se lleva el 66 por ciento del dinero destinado por la Xunta a derivaciones a hospitales privados.

El concierto con el Juan Cardona es, de hecho, el más elevado, sin contar Povisa y el Oncológico de A Coruña, pues recibe anualmente más de 7,6 millones de euros.

Otros tres centros hospitalarios están en manos de Quirón Salud. Son el Miguel Domínguez de Pontevedra, el Quirón Salud de A Coruña y Nosa Señora de Ollos Grandes de Lugo. En total, reciben el 8,8 por ciento de los conciertos del Sergas.

Por último, HM es propietaria en Galicia del Hospital Modelo en A Coruña y de la Rosaleda de Santiago, y sus conciertos representan el 5 por ciento de toda la actividad concertada especializada.

¿Y cuánto paga la Xunta por cada proceso en un hospital privado? Por un día de estancia en planta son 102 euros, por ejemplo, por un día de rehabilitación 3,9 euros. En cuanto a las pruebas una resonancia magnética se paga a 177,9 euros, un TAC a 86,2 y una ecografía a 34,9 euros. Y operar una hernia discal en un centro concertado cuesta a las arcas públicas 1.679 euros.

Desde Ahosgal, sin embargo, denuncian que los conciertos llevan tiempo sin actualizarse y que algunos hospitales incluso se están replanteando si mantener el concierto. De hecho, el contrato para renovar la actividad concertada en el área de Ourense, Verín y O Barco quedó desierto el pasado año.

La patronal de los hospitales esgrime que el Sergas cobra más por la asistencia que presta a terceros que no tienen derecho a asistencia sanitaria (extranjeros, lesionados de tráfico, accidentes deportivos, laborales...) que por los conciertos. A modo de ejemplo, explican que por día hospitalización la Xunta cobra 529 euros pero a los hospitales privados les paga únicamente 102 euros. Por primera consulta Sanidade pasa una factura de 68,9 euros a terceros sin derecho a atención sanitaria, pero la tarifa de la concertada son solo 38,5 euros.