En la última década, la superficie de parcelas urbanas construidas en Galicia aumentó un 30,5%, convirtiéndose en la comunidad con mayor incremento al triplicar la media nacional. Y si solo fuera por su planificación urbanística, este ritmo nunca frenaría, porque los concellos tienen actualmente suelo reservado para construir nada menos que 354.194 viviendas más, una cifra equivalente al 22% del parque inmobiliario, que cuenta con 1,6 millones de inmuebles, si bien el censo –el último oficial disponible– es de 2011. Este ingente número de viviendas previstas en los planeamientos municipales –aunque otra cosa bien distinta es que se pueda llevar a la práctica– es el resultado de la incorporación el pasado año de nuevos concellos al Sistema de Información Urbana del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana y, sobre todo, es el reflejo del excesivo ejercicio de planificación urbanística que se hizo en los años de bonanza económica, reservando miles de metros cuadrados para una desmedida proyección edificatoria.
“Estas cifras responden al crecimiento excesivo que se ha dado en los últimos quince o veinte años, pero no se va a hacer. Es el reflejo de las políticas expansivas del pasado, con planes hechos hace años que no se han revisado. Ahora, la realidad va por otro lado y, además, la Xunta limita bastante el crecimiento urbano”, sintetiza el arquitecto y urbanista José González-Cebrián.
Revisión aconsejable
Lo lógico, según este experto, sería que los concellos “reconsideraran” esta proyección edificatoria, aunque tiene serias dudas de que se haga esta revisión por el coste económico que supone para las arcas municipales. La planificación está fuera de la realidad, porque no hay tanta demanda ni un crecimiento poblacional que la respalde, y además ahora lo que se pretende es rellenar los huecos dentro del suelo consolidado y no continuar expandiendo la superficie residencial, que es precisamente justo lo contrario de lo que preveía en el pasado, con grandes áreas reservadas fuera de los núcleos tradicionales.
Los datos del Ministerio de Transportes, con la información de 213 concellos que representan al 92% de la población, cifran en 354.194 las viviendas que se podrían ejecutar en las bolsas de suelo urbanizable delimitado o sectorizado y de suelo no consolidado. Son 40.000 inmuebles más que los previstos en el informe de 2017 del Sistema de Información Urbana, que por entonces recogía los datos de 179 ayuntamientos. Ahora, en el balance del pasado año, se incorporó la documentación de 34 municipios nuevos.
Distribución provincial
El mayor número de viviendas proyectadas –al menos sobre el papel de los planeamientos municipales– corresponde a la provincia de A Coruña, con algo más de 139.000. A corta distancia le sigue la de Pontevedra, con casi 133.000. Y ya mucho más lejos figuran las de Ourense, con 42.400, y de Lugo, con casi 39.800.
Para esa edificación, los concellos cuentan con 47.600 hectáreas calificadas como suelo urbanizable, que son exactamente la mitad del suelo que en Galicia ya está ocupado urbanísticamente.
Son cifras excesivas, sobre todo en una comunidad que mantiene desde hace años una tendencia demográfica estancada o regresiva. Lo que no impidió, según un informe del Ministerio de Transición Ecológica, que el incremento del suelo urbano ocupado en Galicia fuera el más elevado de España entre los años 2010 y 2019: un 30,5% frente a la media nacional del 11,3%.
Tres meses para los informes sectoriales del Estado
La Xunta instó esta semana al Gobierno central a incorporar a la legislación estatal un límite de tres meses como plazo máximo para emitir los informes sectoriales que sean de su competencia y resulten necesarios para la tramitación de expedientes urbanísticos. Así lo defendió la directora xeral de Ordenación do Territorio e Urbanismo, Encarnación Rivas, durante la Comisión Multilateral de Urbanismo, Ordenación del territorio y Arquitectura convocada telemáticamente por el Ministerio de Transportes.
En esta reunión, la directora xeral se refirió a la “necesidad urgente” de avanzar en la “agilización” de los trámites urbanísticos, ya que los retrasos a la hora de emitir informes sectoriales tienen “repercusiones sobre los plazos” de los procedimientos. Por eso, solicitó que se incorpore a la normativa correspondiente un límite de tres meses, de modo que tenga efectos positivos en caso de silencio administrativo.
CLAVES
1 Impacto en A Coruña y Pontevedra
En la provincia de A Coruña el suelo reservado daría para construir más de 139.000 viviendas, mientras que en la de Pontevedra se quedaría en las 133.000.
2 Más de 47.000 hectáreas de urbanizable
Para edificar tan ingente número de inmuebles, la superficie calificada como urbanizable en los planeamientos municipales asciende a 47.600 hectáreas.
3 Información de 213 ayuntamientos
Los datos del Ministerio de Transporte, Movilidad y Agenda Urbana se elaboran a partir de la información aportada por 213 ayuntamientos que albergan al 92% de la población gallega.
