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Sanidade promoverá una ley para impedir que más de 6.600 menores apuesten por internet

Esta nueva norma, que se aprobará a lo largo de la legislatura, pretende combatir las adicciones al tabaco o al alcohol, pero también la dependencia de las nuevas tecnologías

Un adolescente manipula un teléfono móvil NACHO GALLEGO

Cada año que pasa aumenta el número de adolescentes que utilizan internet de forma compulsiva, pero también los que aprovechan esta vía para realizar apuestas y los que juegan con dinero recurriendo a otras fórmulas. Para tratar de frenar este fenómeno, la Xunta impulsará durante esta legislatura la elaboración y aprobación de una ley específica para menores que intente frenar este tipo de adicciones vinculadas a las apuestas y a las nuevas tecnologías, y que también profundice en la prevención del consumo de alcohol, tabaco o cannabis.

El último ESTUDES, una encuesta sobre uso de drogas en Educación Secundaria que abarca a los jóvenes de entre 14 y 18 años, revela que el 6% (unos 6.600 adolescentes) había jugado dinero a través de internet en los últimos doce meses, mientras que otro 15,5% (16.000 jóvenes) había apostado por otras vías fuera de internet. “Son cifras altas”, advierte la subdirectora xeral de Saúde Pública del Sergas, Silvia Suárez. Sobre todo porque a pesar de tratarse de prácticas ilegales, experimentan una evolución al alza.

Durante la pandemia y como consecuencia del confinamiento domiciliario, el uso de internet –más allá del destinado a la educación– se disparó aún más.

De ahí que Galicia pretenda contar con la primera ley destinada específicamente a los menores para prevenir todo tipo de conductas adictivas. La tarea es compleja, no exenta de dificultades, por lo que se trata de un objetivo de legislatura y de momento la Consellería de Sanidade no se atreve a ponerle fecha de entrada en vigor.

Menores de 14-18 años que hacen apuestas de dinero por internet: 6.600 (6%)

El anterior conselleiro había anunciado en 2016 que la Xunta iba impulsar, precisamente, una reforma legal en materia de drogodependencias y otros trastornos adictivos para mejorar la eficacia en la lucha contra el consumo de alcohol y las drogas, pero también para combatir las adiciones que surgen asociadas al uso de las nuevas tecnologías. Sin embargo, el proyecto no llegó a ningún lado. No tuvo recorrido.

Sobre el consumo de tabaco, alcohol y drogas ya existe una ley gallega de 1996, pero con la futura norma se pretende avanzar un paso más en su desarrollo. “Queda camino por recorrer todavía. Se puede avanzar en todo”, sostiene Silvia Suárez.

“Tenemos que evitar las actitudes permisivas por parte de la sociedad y explorar límites a las ventas, suministro, publicidad, patrocinios o promoción"

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Como líneas de acción, la subdirectora xeral de Saúde Pública identifica más medidas de prevención del consumo, control de la oferta, refuerzo de los procedimientos de alerta temprana, información, formación y una mayor coordinación institucional entre las distintas administraciones.

“Tenemos que evitar las actitudes permisivas por parte de la sociedad y explorar límites a las ventas, suministro, publicidad, patrocinios o promoción. Explicar bien los efectos nocivos de estos comportamientos adictivos con y sin sustancias”, avanza Silvia Suárez.

Menores de 14-18 años que juegan con dinero fuera de la "red": 16.000 (15,5%)

No obstante, la subdirectora xeral evita concretar las medidas. “Nada está decidido, pero se va a poner sobre la mesa”, dice, porque el terreno en el que se moverá esta futura ley es resbaladizo. Por una parte, porque resulta casi imposible poner límites al uso de las nuevas tecnologías por parte de los adolescentes y por otra, porque las competencias están repartidas entre las comunidades y el Gobierno central. “Tendremos que ver qué es lo que se puede hacer”, admite.

El consumo de internet se disparó durante el confinamiento, llegando en muchos casos a una situación de auténtica dependencia. Los usuarios más problemáticos derivados de esta circunstancia serán los que ya lo eran.

Según los últimos datos facilitados por el grupo Universidade de Santiago-Unidade de Psicoloxía do Consumidor e Usuario en Galicia, el 92,4% de adolescentes de entre 12 y 18 años tiene smartphone con conexión a internet y el uso “abusivo” es frecuente: uno de cada cuatro chicos se conecta más de cinco horas al día y un 62,6%, navega por las redes más allá de la medianoche. Sus investigaciones apuntan a un uso problemático en uno de cada cuatro adolescentes, que estarían, según los expertos, “comenzando a desarrollar una adición a la red”. Y ya en otro nivel estarían los menores de edad que recurren a internet para apostar dinero, aprovechándose precisamente de las posibilidades que ofrecen los teléfonos inteligentes.

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