Las bases de En Marea decidieron ayer iniciar su proceso de disolución, aunque no lo hará "inmediatamente". La organización trabajará desde un lugar discreto, "sin liderar ni vehicular nada", y ofrecerá su apoyo y colaboración en la creación un espacio galleguista y democrático que apueste por la justicia social, el feminismo y el medioambiente. La formación considera su etapa "acabada" y constatado su "agotamiento" en los malos resultados de las autonómicas del 12 de julio.

Una vez llegado ese momento, la formación instrumental nacida en 2016 y de la que se fueron disgregando sus principales impulsores en la pasada legislatura autonómica, se disolverá, anunció ayer su candidato en las últimas elecciones autonómicas, Pancho Casal. La organización, que se quedó con la denominación En Marea tras las distintas rupturas de los últimos cuatro años, no llegó al 1 % de los sufragios el pasado julio.