Las paredes de la Casa Cornide, ubicada en la Ciudad Vieja herculina, se han teñido, en parte, de color rosa por unas pintadas contra la familia Franco. Fascistas e insultos a La collares, refiriéndose a la mujer del dictador, Carmen Polo, son algunas de las palabras que se pueden leer sobre la fachada del inmueble, propiedad de los Franco desde mediados del siglo pasado. El edificio tiene protección monumental (nivel I) en el Plan Especial de Protección y Reforma Interior (Pepri) del casco histórico de A Coruña, por lo que las pintadas vandálicas constituyen un delito contra el patrimonio. Además está en proceso de convertirse en Bien de Interés Cultural (BIC). No es la primera vez que aparecen pintadas en ese inmueble, protagonista al igual que el Pazo de Meirás.