-La Comunidad de Madrid ha planteado grabar las clases pero muchos han criticado ya la propuesta al considerar que la enseñanza on line no es sinónimo de emisión de clases por pantalla...

-Estoy de acuerdo. Para eso buscamos clases en youtube...La educación, y creo que el confinamiento nos ha reforzado esta idea, no la vamos a encontrar delante de una pantalla. La educación online es una herramienta, como tantas otras, pero debe ser usada con mesura. Las repercusiones de la educación online de los últimos meses del curso pasado aún no están claras. A medida que el nuevo curso vaya avanzando veremos en qué medida les ha afectado a los niños y niñas. Volver a esto sería un gran retroceso en mi opinión, contando, además, con que nos volveríamos a encontrar con muchos jóvenes sin una buena conexión a internet o medios tecnológicos para trabajar. Tampoco se ha hablado del tema de los derechos de imagen. ¿Estarían todos los profesores dispuestos a que sus clases fueran grabadas? Sinceramente, lo dudo. Y el coste en material para poder hacerlo sería grande, un presupuesto que mejor debería invertirse en otras medidas (como la contratación de más profesorado).

-Además del control de síntomas por parte de las familias, ¿cómo ve el protocolo para la detección de posibles casos en el propio centro?

-El protocolo de la Xunta insiste en derivar esta medida a los docentes. ¿Podemos los profesores discernir los síntomas de una enfermedad de otra? ¿Se nos ha formado para ello? Por supuesto, contratar personal sanitario para cada centro equivaldría a una generosa partida presupuestaria que no están dispuestos a ofrecer. Es por ello que opino que la gran mayoría de las medidas obedecen a un carácter económico y no sanitario. El regreso a las aulas será más seguro cuanta más inversión se haga. Es así de simple. Y esto incluye la desinfección de los centros. Urge más personal para hacerlo. ¿O multiplicamos el trabajo de las personas contratadas a la espera de que la situación sanitaria mejore?