Falta de relevo generacional, envejecimiento de la población, éxodo a las ciudades, recortes en las ayudas... Un auténtico cóctel molotov para el rural gallego que ha colocado al sector agroganadero al límite por la crisis de precios que arrastran desde hace años.

Y es que, aunque los productos que salen de sus explotaciones están a costes de 2020, el precio que perciben por sus cosechas y por la leche es el que percibían hace más de dos décadas. En huerta y fruta se presentan los márgenes más abusivos, con una brecha entre lo que cobra el productor y lo que paga el consumir de más del 500%, denuncia Roberto García, secretario general de Unións Agrarias.

Las cuentas apenas salen a agricultores y ganaderos y son cada vez más los veteranos que se ven abocados a echar el cierre y los jóvenes que desisten de continuar al frente de la explotación de sus padres por la incertidumbre. Para tratar de garantizar el futuro de miles de familias, el sector ha convocado para hoy una protesta ante la Delegación del Gobierno, en A Coruña, con un decálogo de reivindicaciones, tal y como demandan desde UUAA, sindicato promotor de la movilización en la comunidad gallega.

| Precios. Falta de rentabilidad. Esta es la consecuencia de los bajos precios que perciben a día de hoy los agricultores y ganaderos gallegos. UUAA atribuye la falta de "precios justos" al desequilibrio de la cadena alimentaria, que hace que las grandes distribuidoras y las industrias sean "pocas y poderosas" y los agricultores "muchos y débiles".

| Costes. Es el gran problema del sector: el incremento de los costes sin que puedan trasladar esa subida al precio de los productos. Desde hace años venden por debajo de lo que les cuesta producir sus cosechas o cada litro de leche que sale de sus granjas. "Esto hunde sus posibilidades de futuro y abocan al cierre de muchas explotaciones", denuncian.

| Ayudas. Agricultores y ganaderos advierten de los recortes de las ayudas, tanto europeas como del Gobierno central y de la Xunta. "La situación actual es de tal fragilidad, que se hace obligatorio destinar más fondos para apoyar a un sector estratégico y clave para el futuro de la sociedad", demanda Unións Agrarias.

| Barreras comerciales. El veto ruso, el Brexit o los aranceles de Trump al vino, a las aceitunas o al aceite no hacen más que agravar la crisis de precios que vive el sector. En consecuencia, la balanza comercial se resiente y la economía de los agricultores, más.

| Despoblación. Agricultores y ganaderos se sitúan como actores clave en el futuro de la sociedad, pero advierten de que no son valorados como tal y que, como consecuencia, se acentúa la despoblación por la estampida de los jóvenes a las ciudades. Reclaman un mayor protagonismo, porque sin ellos no habrá futuro para el rural, enfatiza Unións Agrarias.

| Reto climático. El sector aprovechará las protestas que se iniciaron este mes por prácticamente toda la geografía española para defender su papel en relación al reto climático. Sin la agricultura habría una naturaleza más asilvestrada y mayor risco de incendios forestales.

| Productos de proximidad. El sector reclama un cambio legislativo para permitir la venta directa de sus productos. En materia de etiquetado, urge a imponer la obligatoriedad de reconocer el de todos los alimentos en su etiquetado.

| Especulación. Desde hace años, agricultores y ganaderos denuncian prácticas comerciales "abusivas y desleales". Por ello reclaman que los intermediarios sean conscientes de su papel y demandan un cambio en la Ley de Cadena Alimentaria: "debe hacerse más exigente para frenar los abusos".