PSdeG y BNG coincidieron ayer en criticar la "sumisión" del presidente de la Xunta y del PP de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, al líder de su partido, Pablo Casado, actitud que perciben en las cartas enviadas por el primero la pasada semana a cada uno de los ministros del nuevo Gobierno para pedir una "cooperación leal" y recordar las demandas gallegas en cada ámbito. Sin embargo, los populares gallegos defendieron su carácter "institucional".

El líder socialista, Gonzalo Caballero, cargó contra "un Feijóo que no es capaz de resolver los problemas de los gallegos" y que busca la "confrontación". El titular de la Xunta ejerce, añadió, como "una marioneta" de Casado y la ultraderecha.

Su homóloga en el BNG, Ana Pontón, tachó a Feijóo de "presidente escribano" y "cartero" por promover "otro ejemplo de propaganda y autobombo" que "roza el ridículo".

El portavoz parlamentario del PPdeG, Pedro Puy, respondió al socialista. "Parece que tiene una obsesión machacona con el tema de la extrema derecha a la que el PPdeG no solo no representa, sino que es su dique de contención", declaró.