La coordinadora de En Marea -liderada por Luís Villares-- acusó ayer al comité electoral del partido instrumental, en el que los críticos ostentan la mayoría, de "querer construir un poder totalitario" después de este órgano pidiese continuar con las elecciones al Consello das Mareas tras la paralización de las primarias a las 11.00 horas del sábado a propuesta de la comisión de garantías -integrada por personas afines de Villares- al detectarse una intromisión no autorizada en el censo.

En una comparecencia pública ayer, el representante legal del partido ante la Agencia Española de Protección de Datos y portavoz de la coordinadora de En Marea, Gonzalo Rodríguez, demandó al comité electoral que "respete los órganos internos", más concretamente la decisión de la comisión de garantías, puesto que es un instrumento con "plena competencia" para actuar "interpretando la normativa".

Así, Rodríguez recordó que el trabajo de esta comisión "también pudieron evaluarlo" en actuaciones pasadas como la consulta para decidir la continuidad de la diputada Paula Quinteiro el pasado mes de mayo después de un altercado con la policía en Santiago. "La comisión de garantías entendió y atendió un enorme número de reclamaciones sobre el propio proceso de votación. Por tanto, no vale decir que servía para el proceso de Paula Quinteiro y no sirve para este", comentó.

Rodríguez quiso trasladar a los inscritos que "las prisas son malas consejeras" para "adoptar decisiones relevantes". Por ello, apeló a "construir un proyecto" con las garantías que En Marea "defiende" para las instituciones públicas y que practica "internamente".

Asimismo, lamentó que esas garantías "fueron quebradas por miembros del propio comité electoral", por lo cual En Marea emplaza a la comisión de garantías la decisión de continuar con el proceso de primarias, que será "en el momento en que esas garantías estén restauradas".

Sobre cómo se restablecerán estos mecanismos, Rodríguez indicó que se mantienen dos auditorías en marcha, una interna y otra externa, "para tener un punto de vista robusto" a través de un informe forense informático que permita saber esta semana "cuál es el nivel de inclusión en el censo" y "si hubo o no alteración de los datos".

A través del documento del perito se podrá saber también "qué personas entraron" en el censo, puesto que la base de datos "documenta todos los procesos". De igual modo, y en términos legales, "si se verifica" que estas actuaciones incurrieron "en un delito penal, los órganos de En Marea tendrán que decidir sobre los pasos a seguir", declaró el portavoz de la coordinadora.

Horas después, Podemos Galicia mostró su total respaldo al comité electoral, órgano que también respondió a Gonzalo Rodríguez negando responsabilidad alguna por su parte en la intromisión el censo, destacando que es el único capacitado para decidir la paralización de las primarias y anunciando que se reserva las acciones legales pertinentes para garantizar que los inscritos puedan celebrar las elecciones primarias en las que compiten, en medio de una fractura total, las candidaturas del portavoz actual de En Marea, Luís Villares, y la del exdiputado en el Congreso David Bruzos, apoyada por Podemos, Anova, Esquerda Unida o los alcaldes de Santiago, A Coruña y Ferrol.

El propio Bruzos, más tarde, exigió que con urgencia se ponga una nueva fecha para la celebración de las primarias "para evitar el desgaste público" y rechazó que el problema se resuelva dialogando entre las candidaturas, sino que tienen que arreglarlo entre el comité electoral y la comisión de garantías,