En los dos últimos años la presencia de avispa velutina se ha incrementado al tratarse de una especie "muy prolífica", según apunta Luis Arenas. Este especialista insiste en que no es más peligrosa sino que, en número, son muchas más. Controlar las reacciones alérgicas previas a picaduras es la clave.

-¿En qué consiste el tratamiento para las personas que han tenido una reacción previa?

-Ponerles una vacuna con veneno de véspula y llevar un botiquín de urgencias con antihistamínicos corticoides y un autoinyector de adrenalina para utilizar en caso de ser picado.Todo paciente alérgico a la velutina tiene que vacunarse con la vacuna más específica posible de las que existen en estos momentos. Cuando llevas unos meses vacunándote, la cobertura de la vacuna es muy alta, del 90%. Vacunarse es la forma de andar seguro ante una reacción que pueda poner en peligro la vida.

-¿Implica la velutina un riesgo especial?

-Si nunca me han picado ni he tenido ninguna reacción, ni local ni general, no tengo que tener miedo porque no tengo ningún riesgo especial con respecto al resto de la población. Muchísimas personas han sido picadas por avispas con reacciones locales normales y no tienen que tener ningún miedo tampoco. Hay que tratar el tema con rigor. En el paciente que no es alérgico nos hace una reacción como la de un tábano, por ejemplo. Si hemos tenido una reacción previa general o local exagerada ese paciente sí que tiene que tener más precaución porque sí que es alérgico, y seguir el tratamiento.

-¿Qué la diferencia de las otras avispas?

-La avispa velutina es muy prolífica y se ha desarrollado mucho últimamente, sobre todo de dos años para aquí. Dentro de unos años va a ser la avispa que nos va a picar más frecuentemente.

-¿Es más peligrosa?

-Es muy importante recalcar la idea de que la avispa velutina no es más peligrosa que otras especies de avispa, con características de composición similares. Pero son más prolíficas y coexisten con nosotros porque invaden nuestro espacio. Se ha hecho muy prolífica, crea nidos con 2.000, 3.000 o 4.000 individuos. Son muchas e invaden nuestro terreno.La picadura es dolorosa como la de un avispón grande pero no son más peligrosas.Todo paciente que haya tenido una reacción alérgica general o una reacción local de más de diez centímetros tiene que ser remitido al servicio de alergia para la vacunación y para que se le explique el uso de los autoinyectores.