A punto de culminar su mandato al frente del BNG, que el domingo celebra su asamblea para elegir nueva dirección, el todavía portavoz nacional del Bloque, Xavier Vence, reiteró que ante la delicada situación en la que se encuentra el Bloque es necesaria una refundación, con "cambios en profundidad", que no deben limitarse a "chapa y pintura". Y además hizo un llamamiento a la unidad de la militancia porque "rupturas en el nacionalismo ya hubo demasiadas".

El político nacionalista hizo ayer balance de sus tres años al frente del BNG y comentó que él tiene la sensación de "no haber conseguido el objetivo" clave, que es colocar al Bloque "de nuevo como una fuerza determinante en el panorama político gallego".

Por eso, confía en que se concreten ahora los cambios organizativos, políticos y de discurso, porque "no se puede plantear una alternativa para desbancar al PP de la Xunta sin sacrificios generosos en general y desde "una posición secundaria o marginal en el tablero político".

"Es necesario sumar a todas aquellas fuerzas que puedan compartir unos puntos mínimos de regeneración del país", defendió.