En la Diputación de Ourense se realizaron contratos por doquier para centros dependientes de la Diputación, algunos ruinosos como la imprenta provincial o el Teatro Principal, y el Centro Cultural llegó a contar con una treintena de ordenanzas y porteros, según la oposición, aunque a finales de 2011 desde el organismos aseguraban que la cifra era de diecinueve.

Las contrataciones -la mayoría de tres meses de duración- incluidas en la querella del fiscal salvo la veintena que Baltar aprobó 12 días antes del congreso del PP de Ourense sin petición alguna, se llevaron a cabo con solicitudes o informes de necesidad de sus jefes de servicio. Estos explicaron sus criterios al fiscal, entre ellos el jefe de personal de la Diputación e hijo del alcalde de Monterrei, José Luis Suárez.

En esa relación aparecen 12 empleos en el Centro Cultural, a petición del director del recinto de exposiciones y conferencias Marcos Valcárcel, con un salario de unos 50.000 euros anuales. Otras 9 altas se produjeron en el Teatro Principal, que dirige la exmujer del actual presidente de la Diputación desde 1996. El recinto ingresó 70.000 euros y su mantenimiento cuenta un millón.

La Diputación es titular de 1.800 kilómetros de carreteras y Baltar hijo ha aplicado un recorte de personal en su servicio. Su padre, sin embargo, contrató 22 personas que ahora analiza el fiscal.

Otro de los casos llamativos es el de los cuatro empleados nuevos para la imprenta provincial, que llegó a tener en nómina a 26 personas. En el último ejercicio perdió 360.000 euros