El voto de la emigración ha cambiado el resultado electoral de la Galicia territorial. La migración del escaño se registró en la provincia de Ourense, donde el PP ha perdido su octavo diputado en favor del PSdeG-PSOE, que logra así su quinto parlamentario por la provincia, uno más que hace cuatro años. La nueva cara en la Cámara autonómica corresponde a María Quintas, que le quita el acta a la popular Yolanda Díaz Lugilde. Los partidos han dado por válidos el escrutinio y no presentaron reclamaciones.

La victoria del PP sigue siendo por mayoría absoluta, pero menos, ya que ahora es justa, con 38 diputados en el Parlamento de Galicia. Y la derrota del PSOE se hace ahora un poco más llevadera, porque ha repetido el mismo número de escaños que en 2005, aunque con 70.000 votos menos. Además, el nuevo reparto de actas de diputados provocado por la diáspora ha hecho que merme la hegemonía del PP en Ourense, que ha perdido un diputado con respecto a los comicios de 2005.

El recuento del voto emigrante se inició ayer en las cuatro provincias, pero sólo en la de Ourense se concluyó el proceso. También porque era la única donde estaba en juego un acta de diputado. En ninguna de las otras tres se prevé cambio alguno, porque la actual distribución está muy consolidada y el vuelco electoral no es posible. El recuento prosigue hoy.

La participación de los emigrantes ha sido inferior con respecto a los anteriores comicios, aportación que todavía quedó rebajada más debido a las nuevas exigencias para acreditar la identificación. Por esta razón, entre un 25% y un 30% de las 107.000 papeletas recibidas por correo fueron declaradas nulas. En la práctica totalidad de los casos fue por no incluir la fotocopia del DNI o del pasaporte e intentar acreditar la identidad con sólo un certificado de nacimiento.

Ésta ha sido la primera vez, a petición del PP, en que a los emigrantes se les ha exigido un mayor control de la documentación para garantizar la transparencia del voto.

En Lugo se recibieron unas 17.000 papeletas, de las que más de un tercio fueron invalidadas. En A Coruña al menos se anuló uno de cada tres votos procedentes de la emigración (35.600 en total), mientras que en Pontevedra no se computaron un 20% de los casi 29.000 sufragios y en Ourense se declararon nulos casi 7.000 votos, un tercio de los 22.527 recibidos.

El recuento en Ourense fue seguido en persona por el secretario xeral del PP, Alfonso Rueda, y la responsable de Emigración del PSdeG-PSOE, Marisol Soneira. A última hora se incorporó el secretario provincial del PSOE, Manuel Vázquez.

De los 15.800 votos escrutados, 7.979 se fueron para los socialistas, 6.465 para el PP y 659 para el Bloque. Al PSOE le bastaban 500 votos de diferencia sobre el PP para arrebatarle el escaño.

El presidente de la comisión gestora del PSdeG, Ricardo Varela, afirmó que “se confirmaron las expectativas de los socialistas gallegos” en el recuento del voto emigrante. “Esto pone de manifiesto la fortaleza de un partido arraigado en Galicia y con vocación de seguir sirviendo a las gallegas y a los gallegos”, aseguró.

Alfonso Rueda felicitó a los responsables de su partido en Ourense por el trabajo y el esfuerzo realizados, “y por la buen noticia que es para los gallegos que el resultado final no varíe con los votos de la emigración, pues mantenemos la mayoría absoluta”, agregó.

El número dos del PPdeG reiteró la necesidad “urgente” de que los emigrantes voten en urna la próxima vez en Galicia, “para que su voto tenga las mismas garantías que el nuestro aquí”.

Manuel Vázquez expresó una “satisfacción agridulce” por el recuento. “Los resultados de Ourense dejan abierto el futuro a la ilusión, pues el PP en esta provincia sigue bajando mientras el PSOE continúa subiendo, y aunque nos sacan una cabeza, estos votos indican que estamos vivos”.

Los votos de Ourense, para Manuel Vázquez, indican que el grupo de diputados socialistas del Parlamento de Galicia “seguirá intacto a pesar de la crisis, los líos y el campo embarrado de la campaña electoral”.

“Quiero servir a mi provincia y al partido”

María Quintas será la quinta diputada del PSOE por la provincia de Ourense. Es directora de un centro educativo y fue concejala en el ayuntamiento de Ourense. “Quiero servir a mi ciudad, a mi provincia y a partido”, declaró la parlamentaria electa tras conocer el nuevo reparto de escaños provocado por el voto de la diáspora.