En febrero el gobierno lalinense anunciaba que la justicia daba la razón al Concello en su negativa a otorgar a Fenosa licencia para la Línea de Alta Tensión (LAT) que afecta a la Fraga de Casas Vellas. Valoraba las pruebas sobre los informes del Consello da Cultura Galega, el Valedor do Pobo y los testimonios del botánico Javier Guitián. Entiende que Casas Vellas y la Fraga de Quiroga conforman una unidad paisajística, mientras que por otro discute la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) de la Xunta. El fallo, recurrible, daba da por buenos los dictámenes del Consello da Cultura Galega, en los que se cita que en el informe no se recoge la existencia de árboles autóctonos centenarios. En esencia, la sentencia indica que el Concello no debe dar licencia para el proyecto. En noviembre tllegaba el no de la Xunta a declarar Casas Vellas como Espazo Natural de Interese Local (ENIL) al cuestionar el trabajo municipal y poner de relevo las alegaciones.