La familia de Alfredo Pérez Rubalcaba enterró ayer sus cenizas junto a los padres del político en el cementerio de La Paz-Tres Cantos, en la localidad madrileña de Alcobendas.

La familia ha decidido que todas las flores recibidas estos días sean entregadas al PSOE para su distribución en los mítines de la campaña electoral.

El que fuera ministro, vicepresidente del Gobierno, líder del PSOE y candidato a la presidencia del Gobierno murió el viernes a los 67 años tras sufrir un infarto cerebral (ictus) dos días antes.

Más de 8.000 personas desfilaron ante el féretro en la capilla ardiente que se instaló en el Congreso el mismo viernes por la tarde y que permaneció abierta hasta las 14.00 horas del sábado.

El PSOE cántabro propuso ayer distinguir a Rubalcaba como Hijo Predilecto de la comunidad a título póstumo.

"Alfredo, gracias por tanto. Tú, como nadie de los que estamos hoy al frente del partido, encarnas lo que el PSOE ha representado y representa para nuestro país", escribió el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en el libro de condolencias de la sede socialista de Ferraz. Sánchez dedicó una página entera a Rubalcaba, "un compañero que representa la lucha por la libertad y la seguridad de los españoles", así como el "compromiso con la justicia social y la igualdad de oportunidades" y la "construcción de una España social y un mundo con la igualdad real".