El temporal de lluvia, el más intenso de la última década, dejó ayer a 500.000 alumnos sin clase en la Comunidad Valenciana, además de cuantiosos daños, carreteras inundadas y viviendas anegadas en Tarragona, Teruel, Valencia y Castellón, donde ayer cayó una nueva tromba de agua.

La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) rebajó de nivel rojo a naranja (riesgo importante) la alerta en las provincias de Castellón y Tarragona y a aviso amarillo (riesgo) en la de Teruel.

Hasta las 17.00 horas de ayer, se recogieron más de 260 litros por metro cuadrado en puntos de Castellón, casi 120 litros en Teruel, más de 90 litros en Baleares y casi 75 litros en la provincia de Soria.

Siete carreteras de Mallorca y otras siete de la provincia de Castellón, dos de ellas de la red principal (N-238 y N-232 en Vinaroz), continuaban cortadas por la lluvia, mientras en Mondoñedo (Lugo), la niebla impedía la circulación por la A-8, según fuentes de la Dirección General de Tráfico (DGT).

En las últimas 24 horas, los equipos de emergencia de la Comunidad Valenciana rescataron a más de un centenar de personas por inundaciones en calles, viviendas y carreteras, retiraron árboles caídos y achicaron agua en comercios y sótanos.

La situación "va calmándose poco a poco", avanzó Rubén Del Campo, portavoz de la Aemet, quien señaló que hoy hay que estar atentos a las lluvias en amplias zonas de Almería, Granada, Málaga y Murcia, donde se prevén acumulaciones de hasta 40 litros por metro cuadrado en una hora.