El ex primer ministro francés Manuel Valls, nacido en Barcelona, apostó este domingo por la formación de una "plataforma abierta" en la que se integren varios partidos no independentistas con vistas a las municipales de 2019 y supeditó su candidatura a la Alcaldía de la ciudad condal a que aquélla se constituya.

"La idea de una candidatura, de un equipo, de un proyecto que sea una plataforma abierta, que no sea una plataforma de un solo partido, es lo que me interesa", dijo sin tapujos. Sin embargo, en una entrevista ayer en la radio catalana, el ex "premier" socialista francés admitió que todavía es "demasiado pronto" para concretar si Cs, el PSC y el PPC se integrarían en esa plataforma. Valls se ha marcado el próximo verano como plazo máximo para tomar una decisión.

"Hay mucha gente" que le ha hablado de encabezar una candidatura para ganar la Alcaldía de Barcelona, pero aún está estudiando "la idea" de la plataforma abierta, que es la que le interesa. Esto es así porque él no ha salido "de un partido de Francia para entrar en otro partido" español. Valls sigue siendo diputado en la Asamblea francesa.

"Lo que necesita Barcelona es un alcalde, un equipo, un proyecto para que esta ciudad siga siendo lo que es Barcelona, una marca internacional y una ciudad con convivencia", propuso el político francés, que no ocultó que si al final decide presentarse, tendrá que documentarse y pasearse por Barcelona más de lo que lo ha hecho hasta ahora, y no venir "a decir mentiras a la gente".

El portavoz de ERC en el Ayuntamiento de la ciudad condal, Alfred Bosch, respondió así a las ambiciones de Valls: "Nada es más fácil que enfrentarnos a candidatos que no tienen un proyecto de ciudad o no quieren a la ciudad de Barcelona. Conocemos todos los barrios de la ciudad, porque hemos trabajado en ellos, codo con codo con la gente".