El vicepresidente primero del Gobierno y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha pedido hoy a los partidos democráticos "prudencia" a la hora de hacer declaraciones en torno a ETA y Batasuna, porque hay "muchas, demasiadas", y les ha reclamado también que estén "tranquilos, firmes y perseverantes".

De esta forma se ha pronunciado Pérez Rubalcaba en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros al ser preguntado sobre las condiciones en las que la izquierda abertzale podría presentarse a las próximas elecciones municipales.

El número dos del Ejecutivo ha insistido en el mensaje que ya dio en el pasado Consejo de Ministros sobre que la política antiterrorista no ha variado, y en que es a Batasuna a la que le corresponde moverse -convenciendo a ETA que deje las armas o rompiendo con la banda- para ser legalizada y no al Estado.

El ministro del Interior ha recordado que se sabe que "en el mundo de ETA hay un debate", aunque ha advertido de que "no hay grandes novedades en esta semana, ni en el último mes, ni en los últimos dos meses". Por tanto, ha dicho, "no hay que cambiar la posición", de ahí que la política antiterrorista no haya cambiado "ni una coma, ni un ápice".

"No hay más: o ETA deja la violencia o Batasuna abandona a ETA. Son las dos posibilidades que tiene para ser legal de acuerdo con las reglas que fija el Estado de Derecho que son las que son y no admite variaciones", ha sentenciado.

"Que se muevan ellos; nosotros no tenemos que hacer nada; por esa razón conviene estar tranquilos, firmes y perseverantes; esa es la posición que le pido a los partidos democráticos, la que tiene el Gobierno", ha afirmado. Y siempre, en esta materia, ha apostillado Rubalcaba, "prudencia".

El ministro, que ha calificado al pacto PSE-PP como sólido y estable, ha asegurado que se reúne "habitualmente" con el PP para abordar la política antiterrorista y que este partido sabe por lo tanto "perfectamente" cómo es. No obstante, ha advertido de que desde el PP se hacen algunas declaraciones que él no haría "seguro" porque "siembran duda y no ayudan".

El ministro se ha mostrado convencido de que "hay una cierta efervescencia mediática en el mundo de Batasuna y ETA" porque los dirigentes de la formación ilegalizada "van de un sitio a otro y hablan y hablan".

Pero ese "es su tema": "son ellos los que tienen que hacer sus deberes y si no los hacen el Estado de Derecho les va a impedir estar en las instituciones".