salud mental

Daniele Cipriano, Ita Argentona TC: “Los trastornos de la conducta son una gran cesta que abarca muchas tipologías diferentes”

Los problemas de salud mental van en aumento entre los más jóvenes

Daniele Cipriano, Director de Ita Argentona TC

Daniele Cipriano, Director de Ita Argentona TC / ITA

Xavier Pareja

La salud mental durante la adolescencia preocupa a familias, instituciones y expertos. En los últimos años, los trastornos de este tipo han aumentado, especialmente tras la crisis sanitaria de la pandemia. Para arrojar más luz sobre el asunto hablamos con Daniele Cipriano, Director del centro especializado en Trastornos de Conducta y Trastornos de Neurodesarrollo de Ita Argentona.

Los trastornos de conducta abarcan un gran abanico de problemas conductuales y emocionales. ¿Cuáles son los que se dan más frecuentemente? 

Los trastornos de conducta son una gran cesta que abarca muchas tipologías y problemas diferentes. Los aspectos que tienen en común son los conflictos de convivencia que normalmente se dan en casa y en la escuela y que se pueden expresar de dos maneras: de forma emocional, con la rabia, y a través de la conducta, con las agresiones y con violencia.  

Y estos pueden empezar durante la infancia o en la adolescencia. En el primer caso, suelen ser más graves y más resistentes al cambio. Si comienzan en la adolescencia se pueden complicar cuando se asocian a absentismo escolar y/o consumo de estupefacientes. 

Ita trabaja desde hace años con jóvenes.

Ita trabaja desde hace años con jóvenes. / Cedida

Muchas veces asociamos los TC con niños rebeldes que viven situaciones complejas en casa. ¿Es correcta esa generalización? ¿se pueden dar casos en situaciones “normales”? 

A los chicos y chicas con este tipo de trastorno se les suele etiquetar de ‘malos’, ‘maleducados’ o incluso se tiende a pensar que pertenecen a un grupo social marginal. Pero la realidad es que, cada vez más, este tipo de dificultades se dan en todas las clases sociales y, también cada vez más, la sociedad se va liberando de los prejuicios. Ahora entendemos que una chica con TC es una adolescente (o niña) en crisis, una crisis que sufre ella misma y su familia. Es una cuestión de corresponsabilidad, cuando entendemos que la salud mental es cosa de todos, de principio a fin, muchos prejuicios caen solos. 

La salud mental de jóvenes y adolescentes ha empeorado. ¿Qué está sucediendo?

Decíamos que ’la sociedad se ha liberado de los prejuicios’ y ve en los comportamientos problemáticos de nuestros adolescentes una cuestión de salud mental; para decirlo de alguna forma: ‘No hay más estrellas en el universo, solo hay mejores telescopios’. De otra forma, acabaríamos pensando que los jóvenes y adolescentes de hoy son más frágiles y vulnerables cuando, simplemente, los miramos más y de otra forma. Los prejuicios también están cayendo entre los propios jóvenes y, entre ellos, cada vez más, se habla de salud mental. 

Cómo detectar un TC

¿Qué edad es la más frecuente para desarrollar un TC? 

En la adolescencia, aunque el debut es cada vez más temprano. 

¿Qué síntomas podemos detectar en una persona con Trastorno de Conducta? 

Un estado de rabia constante, dificultad muy sostenida en aceptar normas y límites y extrema imposibilidad de tolerar la frustración. Negativa a ir al colegio, abandono de las actividades extraescolares, uso de la violencia como instrumento de control y manipulación, etc.

Los prejuicios también están cayendo entre los propios jóvenes y hablan cada vez más de salud mental

¿Qué causas suelen estar detrás de este tipo de trastornos?

Como todo trastorno, sus causas son múltiples y complejas. Normalmente, son una combinación de aspectos temperamentales y/o de neurodesarrollo (como un diagnóstico de Trastorno por Déficit de la Atención o un Trastorno del Espectro Autista) que predisponen al trastorno. Además, a esto se suman las posibles situaciones relacionales y sociales (familiares, grupo de iguales) que ha vivido cada persona en su historia. La suma de estos y otros factores acaban llevando al límite la persona hasta que su malestar se manifiesta en un trastorno, en nuestro caso, de la conducta. 

Tratamiento integral de los trastornos de conducta

¿Cómo se trabaja en Ita con los casos TC?

En Ita ponemos al paciente en el centro del tratamiento junto a su familia. Trabajamos los aspectos sintomáticos y conductuales (violencia, absentismo, consumo de estupefacientes), además de los aspectos más profundos que tienen que ver con las emociones, las relaciones y la identidad. Siempre en un marco interdisciplinar con un equipo integrado por psicólogos, psiquiatras, educadores sociales, terapeutas ocupacionales, psicopedagogos y neuropsicólogos.

Hay que acompañar a la familia en el proceso de reinserción del adolescente en su día a día

Entonces, la familia juega un papel fundamental. ¿Cómo se trabaja con ellas en el tratamiento? 

Es el motor del cambio, en la familia están todos los recursos necesarios para poder emprender el proceso de recuperación, salvo en casos excepcionales. Por lo tanto, lo primero que hay que hacer es construir un marco de corresponsabilidad delante del cambio, y luego volver a abrir caminos de comunicación. También restablecer la claridad de los roles y elaborar heridas emocionales conjuntamente. Al mismo tiempo, hay que acompañar a la familia en el proceso de reinserción del adolescente en su día a día. 

¿Cómo debe actuar la familia ante un caso?

Hacer equipo, apoyarse los unos a los otros, buscar soporte en la familia extensa y los amigos, revisar el funcionamiento familiar, coordinarse con la escuela… Y si esto no funciona, buscar la ayuda de un profesional de la salud mental. 

¿Para qué perfiles sirve el hospital de día y para cuáles la hospitalización 24 horas?

Hay tres variables en juego para decidir que intensidad de tratamiento requiere cada caso: 

1. Las áreas afectadas: familia, escuela y extraescolares. Cuántas más áreas se vean afectadas, más grave será el diagnóstico.

2. Gravedad de las conductas: violencia, absentismo escolar, uso de drogas, fugas de casa, etc.

La ‘recuperación’ es un proceso de cambio

La ‘recuperación’ es un proceso de cambio / Cedida

3. Conciencia del problema: a veces hay casos que no tienen la gravedad como para un ingreso de 24 horas, pero la falta total de disposición a realizar un tratamiento de hospital de día o ambulatorio se orienta al paciente a una hospitalización completa. 

¿Cómo es el proceso de recuperación de los pacientes y cuándo consideráis que está recuperado?

Lo más importante, y en primer lugar, es entender que la ‘recuperación’ es un proceso de cambio, este proceso muchas veces no coincide con las expectativas del paciente y de su familia. En segundo lugar, también es necesario saber que la ‘recuperación’ rara vez es un proceso lineal, es más bien un ir y venir entre la realidad del día a día y la elaboración que hacemos en los espacios terapéuticos.

Las recaídas en viejos comportamientos son, por lo tanto, habituales e incluso necesarias para que el aprendizaje sea real y estable.