El PSOE cierra filas con Besteiro tras su debacle electoral: “El futuro pasa por él”

Formoso culpa a la “polarización” entre PP y BNG del peor resultado socialista y avanza “cambios orgánicos”

Elude concretar sus “errores”: “Repetiríamos la estrategia”

Secretario Xeral del PSdeG, Valentín González Formoso.

Secretario Xeral del PSdeG, Valentín González Formoso. / Xoán Álvarez

Daniel Domínguez

Daniel Domínguez

El PSdeG se encomienda a José Ramón Gómez Besteiro y cambia la tendencia desde 2009, año en que el bipartito que formaba con el BNG perdió un diputado que los alejó de San Caetano y los socialistas comenzaron un carrusel de cambios internos que derivaron en cuatro candidatos diferentes desde entonces: Pachi Vázquez, Xaquín Fernández Leiceaga, Gonzalo Caballero y el propio Besteiro.

Tres días después de las elecciones autonómicas en las que el PSdeG sufrió su peor varapalo, perdiendo cinco escaños hasta caer a solo 9 diputados, la cúpula del partido en Galicia se ha reunido este miércoles en Santiago. Su análisis se resume en un cierre de filas en torno a Besteiro, el avance de cambios orgánicos sin concretar, apuntar a la polarización entre PP y BNG como lastre y lamentar la falta de tiempo del candidato.

Lo más relevante a nivel interno, según fuentes socialistas, es que, a diferencia de otras ocasiones, ahora se pretende dar tiempo al todavía diputado en el Congreso para intentar levantar al partido. “Necesitamos estabilidad y galleguizar el proyecto, todos tenemos claro que Besteiro es un buen candidato, necesita tiempo”, apunta un asistente al encuentro, que destaca el consenso detectado en este punto.

“Nuestra apuesta sigue siendo Besteiro, el futuro pasa por él”, proclamó el secretario xeral del PSdeG, Valentín González Formoso, un apoyo mostrado también por el presidente del Gobierno y líder del PSOE, Pedro Sánchez, ante un grupo de periodistas durante su visita a Rabat.

Formoso compareció ante los medios por primera vez desde el 18-F y regresó a la reunión de la ejecutiva nacional del partido, celebrada en Santiago y de la que no forma parte el propio Besteiro.

Las primeras conclusiones pasan por asumir unos resultados “claramente malos” y reconocer “errores”. Cuando se le preguntó si podía concretarlos y si el protagonismo de Ferraz y el propio Sánchez habían lastrado sus resultados, eludió concretar esos fallos y reivindicó incidir en la estrategia del Gobierno amigo. “Volveríamos a repetir la estrategia de campaña”, respondió.

Escaso tiempo

Formoso reiteró el argumento del escaso tiempo de que dispuso Besteiro, proclamado candidato en octubre, para darse a conocer, a pesar de que fue exonerado de las causas que lo apartaron de la política en 2016 a principios del año pasado, cuando fue nombrado delegado del Gobierno. El PSdeG decidió no celebrar entonces primarias y luego la conformación del Gobierno central fue alegada para frenar el proceso.

Reunión de la Ejecutiva del PSdeG, este miércoles.

Reunión de la Ejecutiva del PSdeG, este miércoles. / Xoán Álvarez

“Incorporamos a un candidato que entraba a 60 kilómetros por hora mientras otros dos corredores iban a 180”, tiró de comparación en alusión a Alfonso Rueda (PP), vicepresidente de la Xunta desde hacía 13 años y jefe del Ejecutivo desde hace dos, y Ana Pontón (BNG), que asumió su tercera candidatura consecutiva y este año cumple dos décadas de diputada.

Dardos a PP y BNG

Precisamente, la “polarización” entre esas dos opciones fue señalada por la ejecutiva socialista, según Formoso, como clave en su desplome. Ahí, aprovechó para lanzar dardos a PP y BNG. “Feijóo dijo que consideraba las gallegas un plebiscito a su persona y es una falta de respeto a Galicia, se votó en clave gallega”, indicó. A los nacionalistas les afeó sacar pecho. “Le digo a Néstor Rego que considera que el 35% del electorado gallego apuesta por el soberanismo que nada más lejos de la realidad”, aseguró.

El PSdeG trata de sacudirse el shock. Formoso avanzó que se acometerán “cambios en el ritmo, el mensaje y orgánicos”, afrontando un Comité Nacional del partido, aunque no concretó fechas. Tampoco respondió a si esos cambios implicarán la asunción de la Secretaría Xeral por parte de Besteiro para entregarle el poder orgánico y acabar así con la bicefalia actual.

Sí quiso rechazar la visión del PSdeG como una suma de poderes locales sin proyecto autonómico. “Tenemos que intensificar la exposición de la gestión que hacemos en Madrid y Bruselas”, reflexionó.

El 18-F ha supuesto también un duro golpe para Pedro Sánchez, que se implicó de manera intensa en la campaña con la aspiración de que la izquierda apartase al PP de la Xunta y dar la estocada al liderazgo de Núñez Feijóo en la calle Génova.

Este miércoles asumió en Rabat “toda la responsabilidad” del resultado en tanto que secretario general del PSOE y en una conversación informal reconoció su apoyo a Besteiro.

A pesar de su implicación en Galicia, descartó un “cambio de ciclo” en la política estatal a partir del 18-F e ironizó con “las veces que puede cambiar el ciclo de aquí a cuatro años”, insinuando que agotará la legislatura.